Por: María de los Angeles Fernández

Ayer tuve la oportunidad de participar en una de sus charlas digitales en la que manifestaba que es la época de transformarse en líderes resilientes que ayuden al ciudadano a adaptarse y salir adelante en esta adversidad.

La resiliencia no solo implica fortaleza o resistencia ante las dificultades o ante la adversidad sino elasticidad y flexibilidad para doblarse sin romperse, para adaptarse a las circunstancias, para tener la mente abierta a pensar nuevos caminos e inspirar a las personas a alcanzar sus metas.

Sóla mencionó a los peores 4 presidentes  que han sido aberrantes en esta pandemia, Donald Trump, (E.E.U.U.) quien priorizó sus interés dejando al país y especialmente a Nueva York en una desgracia sanitaria; Pedro Sánchez (España), el inepto; Manuel López Obrador (México) el demente y Boris Johnson (Inglaterra) soberbio, pedante, burlón subestimando la crisis.  

En estos líberes se puede observar 4 aspectos que no se deben hacer en crisis sanitarias, Mentir, Subestimar, Aletargar Decisiones (significa más muertos) y buscar Rentabilidad Política.

Destacó a dos jefas de Estado que supieron ponerse a la altura de las circunstancias, la canciller  alemana Angela Merkel  y la primer ministro de Noruega Erna Solberg.

Sola señaló que es el momento de terminar con el sistema capitalista y conformar un mundo altruista, solidario y cooperativo, sentando las bases para una nueva democracia con un pacto social contemporáneo.

Todo ello adaptado al cambio que ya llego, dejando a la democracia estrecha, y marcando el camino hacia una digital directa y horizontal.

Las ideologías no sirven para salir de esta crisis sanitaria, remarcó una y otra vez, destacando que las que sí sirven son las ideas, dejando de lado la rentabilidad política. No busquen la foto busquen la solución para proteger la salud del ciudadano y reactivar su economía.

Va a ser duro pero se podrá salir, es un momento donde los políticos deben ser claros, transparentes y coherentes.

Un buen líder si le pide a la gente que se quede en su casa, debe pensar en los desamparados y ayudarlos para que tengan que comer. Un buen líder que pide responsabilidad social no sale  a sacarse la puta maldita foto, no sale a sacar réditos políticos, trabaja con todos en una misma dirección para salir  juntos de esta tragedia sanitaria. 

("Sangre, esfuerzo, lágrimas y sudor “ como lo dijo el primer ministro británico Winston Churchill , el 13 de mayo de 1940, ante el parlamento, ocho meses después de haber comenzado la Segunda Guerra Mundial)