Más Autos Se Encarecieron En Pesos
La suba del dólar se comió la festejada quita del impuesto a los 0Km 

La suba del dólar se comió la festejada quita del impuesto a los 0Km 
08/01/2018 |

Los cambios en el tributo favorecieron a que cerca de 150 modelos se hayan abaratado hasta un 12% en billetes verdes. Sin embargo, el alza del 10% que experimentó la divisa en apenas un mes barrió total o parcialmente con ese beneficio. Qué pasará con los valores de los vehículos masivos.


La escalada en la que se embarcó el dólar en las últimas semanas y que lo llevó a un nivel récord, obligó a las automotrices a tener que lidiar con una variable que no estaba en el radar.

Cada vez que el billete verde sube, especialmente cuando lo hace a la velocidad que registró desde comienzos de diciembre, los precios de venta al público sufren un incremento.

Y esto no distingue "pedigree": los modelos importados de alta gama -que cotizan en esa divisa- se ven impactados de manera directa. Pero también se ven afectados los de marcas masivas, que en su mayoría se traen de Brasil o bien son ensamblados en el país con un 70% de piezas importadas.

El problema en este arranque del 2018 es que la suba del dólar coincidió con la eliminación del primer escalón del impuesto a los 0Km.

Si bien la consecuencia de esta quita generó que cerca de 150 modelos bajaran de precio (mayormente los que cotizan en moneda dura), la devaluación de los últimos 30 días terminó licuando total o parcialmente ese beneficio.

Así, quedó empañada la eliminación de una parte de los tributos a los 0Km de alta gama que fuera anunciada a fines de octubre de 2017 el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, y que había generado una fuerte expectativa.

Finalmente, unos días antes de que concluya diciembre, el Gobierno logró aprobar la reforma tributaria, suprimiendo la alícuota del 10% que gravaba a los 0Km que tenían un valor de fábrica de entre $380.000 y $800.000.


Con esta definición, las marcas generalistas y las premium, arrancaron el 2018 con varios cambios en sus listas de precios, que comenzaron a hacerlas circular entre su red de agencias.

Por los valores que se manejan, en general, los beneficiados por la reducción del impuesto son modelos importados premium o versiones tope de gama de marcas generalistas que cotizan en billetes verdes.

Los mismos se terminaron abaratando entre un 4% y un 12% en términos de divisas estadounidenses.

Pero este beneficio difícilmente se traduzca en un gran beneficio para el bolsillo de los compradores argentinos.

Sucede que entró a tallar fuerte una variable que no todos tenían en el radar: el sostenido avance del tipo de cambio, que llevó a que se licuara el beneficio de la quita del gravamen.

No sólo eso: también provocó que varios autos que efectivamente terminaron bajando de precio en dólares tras la reforma, luego se terminaran encareciendo en pesos por el efecto devaluación.

Sucede que a principios de diciembre, el billete verde cotizaba a $17,54. En ese momento, tocó su valor más bajo desde septiembre.

Por esos días, el Gobierno ya había anunciado su intención de introducir cambios a los impuestos a los 0Km, lo que gatilló una actitud "wait and see" por parte de compradores de vehículos de alta gama.

Así fue como Audi, Mitsubishi o Alfa Romeo cerraron diciembre con una caída respecto del mismo mes de 2016.

Sin embargo, desde ese piso que llegó a tocar, el billete verde luego inició su escalada que lo llevó a alcanzar un récord de $19,21, según se desprende del valor promedio de bancos públicos y privados, lo que implicó un avance de casi 10% en apenas un mes.

¿Qué implicó esto? Que todos aquellos modelos cuyos valores en dólares experimentaron una reducción por debajo de esa tasa del 10%, en la práctica terminaron "empatados" o encareciéndose en términos de moneda nacional.

Efecto licuación
Hay numerosos modelos cuyos valores en divisas se redujeron pero que igualmente aumentaron en pesos. A modo de ejemplo:

-En el caso de la Suzuki Vitara GL, en diciembre tenía un valor de u$s35.000. Ahora, cotiza a u$s33.500.

-Se trató de una baja del 4,2% en dólares, unos u$s1.500. Sin embargo, por el efecto devaluatorio, en pesos subió casi 5%, equivalente a un alza de $29.000.

-Algo similar ocurrió con Mercedes Benz: el modelo A 200 Urban en enero pasó a costar u$s40.500, unos u$s2.000 menos que en diciembre (-4,7%).

-Sin embargo, el avance del tipo de cambio licuó todo ese beneficio: esa misma unidad ahora cuesta $18.000 más, lo que implica un encarecimiento del 4,3% en moneda nacional.

Un efecto similar se observa en los modelos tope de gama de marcas generalistas, como Volkswagen, Ford o Toyota.

-La Ford S-Max Titanium, por ejemplo, experimentó una rebaja del 8,3% en dólares, lo que representó una quita de u$s5.000.

-Claro que, devaluación mediante, dicha mejora quedó anulada, dado que en pesos esa misma unidad se encareció un 0,4%.

Dentro de las pocas marcas que lograron conservar una pequeña rebaja en términos de pesos está Hyundai.

Modelos de SUV como Grand Santa Fe o New Tucson registraron una reducción que promedió el 11% en billetes verdes.

Traducido al tipo de cambio actual, esto terminó redundando en una rebaja cercana al 2,5% en pesos.