Dos investigadores de la escuela Sloan de Administración de Empresas del Instituto Tecnológico de Massachussetts, investigaron sobre cómo colaboran las redes sociales en impulsar el deporte saludable; un fenómeno que tiene cada vez más interés para médicos y sociólogos. Han utilizado los hábitos deportivos como un enfoque práctico y de alta precisión, para investigar esta relación poco pensada.

La propuesta establece que si dos amigos en Facebook salen a correr a diario, es porque uno ha contagiado el hábito al otro o ambos tenían esa tendencia a correr previamente.

Para estudiar este comportamiento han utilizado un diseño experimental innovador y preciso que incluyó a más de 1 millón de personas. Evaluaron las redes sociales de los participantes incluyendo más de 3 millones de contactos en el estudio.

Según refieren los investigadores, ellos encontraron que hacer ejercicio es socialmente contagioso. De esta forma establecen la posibilidad de que se genere un derrame social impulsado por la realización que se genera al hacer ejercicio.

Uno de los hallazgos obtenidos más interesantes es que los corredores menos activos influyen sobre los más activos, pero no al revés; y tanto las mujeres como los hombres contagian a los hombres, pero solo las mujeres contagian a otras mujeres.

Esta información supone que podrá ser utilizada para generar distintas campañas de prevención de enfermedades cardiovasculares impulsada por una de las herramientas más utilizadas en estos tiempos.