El panorama que se presenta en torno al dengue no es muy alentador. Los funcionarios de las carteras sanitarias de todo el país, reunidos en torno al Consejo Federal de Salud (Cofesa) tuvieron que admitir ayer que la epidemia de dengue ingresó en su etapa de mayor propagación. Semanas atrás, cuando el ministro de Salud de la Nación, Jorge Lemus, estuvo en Corrientes había adelantado que para abril se esperaba el pico de mayor contagio. En ese sentido, reconocieron ayer que el proceso de contagio se acelera en lugar de disminuir. De acuerdo con los datos oficiales, hay 16.000 casos confirmados de dengue, aunque ha otros 6.000 en etapa de análisis para ser confirmados o descartados. “Hay 20.000 casos de dengue que las provincias notificaron a la Nación, de los cuales 4.000 fueron descartados y 6.000 están en estudio”, sostuvieron ayer. La provincia más afectada es Misiones, con más de 5.000 casos, seguida por Formosa y las provincias del Noreste argentino (NEA). En Corrientes la cifra de personas infectadas se encuentra en 370, y la mayor cantidad se encuentra en la capital correntina. Los funcionarios reconocieron también que al ritmo que proliferan los contagios, este año se llegará a los cerca de 27.000 que hubo en el 2009 a raíz del cambio en las condiciones ambientales, lluvias y altas temperaturas y la situación en los países vecinos.