Con Sólo Declarar
Remisero que baleó a un colega fue liberado 

Remisero que baleó a un colega fue liberado 
11/11/2015 |

Hirió a otro trabajador del volante, según testigos, en medio de una discusión en la vía pública. Su única sanción fue el inicio de una causa.

 

 

Jo­sé Luis Z., un re­mi­se­ro de 33 años, es­tá sos­pe­cha­do de ha­ber dis­pa­ra­do a un co­le­ga du­ran­te un al­ter­ca­do sus­ci­ta­do en ple­na vía pú­bli­ca, ha­ce unos dí­as. A pe­sar de que se tra­ta de un he­cho gra­ví­si­mo, el hom­bre que­dó en li­ber­tad sim­ple­men­te con pres­tar de­cla­ra­ción.
Al­re­de­dor de las 18:30 del vier­nes un re­mi­se­ro su­frió una he­ri­da de ba­la en su pier­na, en el mar­co de un al­ter­ca­do que man­tu­vo con otro hom­bre, en ple­na vía pú­bli­ca.
El he­cho co­men­zó en ave­ni­da In­de­pen­den­cia y Sa­a­ve­dra del ba­rrio An­tár­ti­da Ar­gen­ti­na. Allí una mu­jer hi­zo se­ñas a un re­mís, que se pa­só de lar­go y fre­nó a unos me­tros ade­lan­te, lo cual fue apro­ve­cha­do por otro “tra­ba­ja­dor del vo­lan­te” que in­ter­cep­tó a la clien­te y “de­jó pa­gan­do” al pri­me­ro. Es­to ge­ne­ró un cru­ce ver­bal en el lu­gar, que se ex­ten­dió unas cua­dras, de­bi­do a que el re­mi­se­ro que ha­bía per­di­do el clien­te de­ci­dió se­guir al otro. De es­ta for­ma am­bos ve­hí­cu­los lle­ga­ron has­ta In­de­pen­den­cia y Cha­ca­bu­co, don­de se de­tu­vie­ron an­te un se­má­fo­ro en ro­jo.

En me­dio de los in­sul­tos que no ce­sa­ban, el re­mi­se­ro con el que via­ja­ba la mu­jer ha­bría op­ta­do por ba­jar­se del au­to, acer­car­se al otro y dis­pa­rar con­tra su co­le­ga, lo que ge­ne­ró el pá­ni­co de los tran­se­ún­tes y de la clien­te, quien se ale­jó an­te el gra­ví­si­mo he­cho de vio­len­cia.
Pro­duc­to del ata­que, el otro con­duc­tor su­frió una he­ri­da de ba­la en una pier­na, mien­tras per­so­nas en el lu­gar aler­ta­ban a la Po­li­cía a tra­vés de lla­ma­das te­le­fó­ni­cas, que se efec­tua­ban al sis­te­ma de emer­gen­cia 911. Tras ello el ata­can­te se re­ti­ró del lu­gar per­se­gui­do por el dam­ni­fi­ca­do, quien de­ci­dió de­te­ner­se en la es­qui­na de ave­ni­da Ra­úl Al­fon­sín (Ex Cen­te­na­rio) y Ta­cua­rí, de­bi­do a que el do­lor lo obli­gó a bus­car ayu­da. De es­ta ma­ne­ra efec­ti­vos po­li­cia­les se pre­sen­ta­ron y pi­die­ron la asis­ten­cia de una am­bu­lan­cia, que lo tras­la­dó al Hos­pi­tal Es­cue­la.
Lue­go del ata­que, los efec­ti­vos de la co­mi­sa­ría De­ci­mo­no­ve­na ini­cia­ron una in­ves­ti­ga­ción pa­ra dar con el pa­ra­de­ro del agre­sor, te­nien­do con­si­go los da­tos del au­to­mó­vil en el que se mo­vi­li­za­ba, un Fiat Uno blan­co. Los pri­me­ros in­for­mes die­ron cuen­ta que el sos­pe­cho­so al­qui­la­ba el men­cio­na­do ro­da­do pa­ra tra­ba­jar de re­mi­se­ro. Asi­mis­mo se emi­tió un pe­di­do de cap­tu­ra.
En con­se­cuen­cia, en el ba­rrio Pi­ra­yuí se pro­du­jo un alla­na­mien­to en una vi­vien­da, don­de se en­con­tró al sos­pe­cho­so y se se­cues­tró un ar­ma de fue­go, que se­ría la uti­li­za­da en el he­cho, y el ve­hí­cu­lo Fiat Uno blan­co. El su­je­to en cues­tión fue iden­ti­fi­ca­do co­mo quien ha­bría efec­tuado el dis­pa­ro. Sin em­bar­go, tras va­rias ho­ras de­mo­ra­do re­cu­pe­ró la li­ber­tad sim­ple­men­te con dar su ver­sión del he­cho aun­que así que­dó su­pe­di­ta­do a una cau­sa de abu­so de ar­mas y le­sio­nes. Por su la­do, la per­so­na per­ju­di­ca­da fue in­di­vi­dua­li­za­da co­mo Nor­ber­to