El Contexto De Nisman:
 Elecciones en Israel y embestida contra Irán

 Elecciones en Israel y embestida contra Irán
27/01/2015 |

El caso de la muerte del fiscal Alberto Nisman, que lanzó acusaciones contra la presidente Cristina de Kirchner por un supuesto encubrimiento a funcionarios iraníes en la voladura de la AMIA tiene su contexto internacional que muestra a Israel en plena campaña electoral. Así es como el oficialismo derechista de Benjamin Netanyahu encabeza un nuevo embate contra Irán (tema que había quedado "dormido" desde hace más de un año) mientras en Israel se organiza una coalición de partidos árabes para hacerle contrapeso.


- El caso de la muerte del fiscal Alberto Nisman en nuestro país, que anoche mereció algunas consideraciones de la presidente Cristina Fernández de Kirchner en cadena nacional, tiene un contexto internacional que incluye los comicios en Israel y una nueva embestida del primer ministro Benjamin Netanyahu contra Irán.

Días atrás el primer ministro israelí destacó que "hay que impedir que Irán obtenga armas nucleares que apunten a Israel". Agregó que este esfuerzo "debe ser global" porque el régimen iraní representa una "amenaza mortal" para su país. En marzo dará un discurso en el Congreso norteamericano contra el gobierno de Rohani

Netanyahu defendió el domingo el discurso que espera realizar ante el Congreso estadounidense sobre Irán, asegurando que tenía la obligación moral de hablar sobre un tema que plantea una amenaza mortal para su país.

Su visita a Washington programada para marzo ha provocado un distanciamiento con la Casa Blanca y ha generado acusaciones en Israel de que Netanyahu está socavando alianza claves que tiene el país en el extranjero, en un intento por ganar una elección dos semanas después del viaje.

Al informar a su gabinete del discurso del 3 de marzo ante el Congreso, Netanyahu dijo que su prioridad era instar a USA y a otras potencias a no negociar un acuerdo nuclear iraní que ponga en peligro a Israel.

"En las próximas semanas, las potencias podrían llegar a un acuerdo marco con Irán, un acuerdo que podría dejar a Irán en el umbral de un estado nuclear", dijo en declaraciones difundidas por emisoras israelíes.

"Como primer ministro de Israel, estoy obligado a hacer todo lo posible para impedir que Irán obtenga armas nucleares que apunten al Estado de Israel. Este esfuerzo es global y voy a ir a donde sea invitado para exponer el caso de Israel y defender su futuro y existencia", dijo.

John Boehner, republicano y presidente de la Cámara de Representantes, invitó a Netanyahu sin informar a la administración de Barack Obama, en lo que la Casa Blanca consideró una falta al protocolo.

Barack Obama, que tiene una relación áspera con el derechista Netanyahu, no se reunirá con el líder israelí durante la visita a Washington, dijo su oficina. Esta decisión fue ampliamente tratada en los medios de comunicación israelíes como un desaire.

La Casa Blanca ha citado la proximidad de las elecciones en Israel, el 17 de marzo, y el deseo de evitar influir en las mismas para justificar que no se formule una invitación a la Oficina Oval.

Seis potencias mundiales -USA, Gran Bretaña, China, Francia, Alemania y Rusia- han dado de plazo hasta finales de junio para alcanzar un avance diplomático con Irán y poner fin a una larga disputa sobre las ambiciones nucleares de Teherán.

Coalición

En Israel cuatro partidos políticos, que representan sobre todo a la minoría árabe de Israel, han anunciado su intención de unirse para presentarse a las elecciones del próximo 17 de marzo, un movimiento que supone la creación de un contrapeso frente al primer ministro, Benjamin Netanyahu, y sus aliados de la derecha.

Las últimas encuestas de opinión sugieren que podrían alcanzar once escaños en un Parlamento de 120, casi el mismo número que conseguirían por separado pero que al unirse aumentan su influencia en la toma de decisiones.

La coalición, que se firmó el jueves, es una respuesta de supervivencia después de que el Gobierno elevase el umbral necesario para entrar en el Parlamento, dejando a dos de los cuatro partidos al borde de la extinción.

Pese a ello, Masud Ganaim, parlamentario por el partido Raam, ha subrayado que la creación de la coalición está ligada a su apoyo a un Estado palestino. "La comunidad árabe en Israel quiere que unamos fuerzas para que podamos tener más influencia y desafiar las políticas racistas del Gobierno Netanyahu", ha explicado.

Los cuatro partidos: Lista Árabe Unida (Raam), el Movimiento Árabe por la Renovación (Taal), la Asamblea Nacional Democrática (Balad) y el Partido Árabe-judío del Frente Democrático por la Paz y la Igualdad (Hadash), cubren un espectro ideológico islamista muy amplio.

El 20 por ciento de la población de Israel es árabe, en su mayoría musulmanes, y el 55 por ciento de ellos participan en las elecciones nacionales. Más del 80 por ciento de sus votos van a los partidos árabes.

Buenas relaciones con Rusia

Israel mantendrá buenas relaciones con Rusia independientemente del desenlace de las elecciones del marzo próximo y pese a probables cambios en la dirección del país, declaró este lunes a Sputnik News el ministro de Exteriores israelí, Avigdor Lieberman.

Lieberman comienza hoy su visita a Moscú, la que probablemente será la última en su calidad de canciller.

"El mantenimiento de buenas relaciones con Rusia es una cuestión de principios y una prioridad para Israel, no es un asunto de simpatías o antipatías personales, sino una necesidad hecha conciencia", señaló Lieberman.

También indicó que Israel no puede permitirse menospreciar las buenas relaciones establecidas con un jugador tan importante como Rusia. "No me imagino a un político israelí sensato en rango de primer ministro o canciller que se atreva a modificar este paradigma", subrayó.

Al reconocer que lo de hablar un idioma común es una ventaja que puede perderse si él y otros políticos israelíes procedentes de la desaparecida Unión Soviética quedan sin carteras tras las elecciones, Lieberman al mismo tiempo expresó la seguridad de que "la principal línea política se mantendrá".

Los sondeos respecto a los resultados de las próximas elecciones muestran un considerable debilitamiento de las posiciones del partido Israel Nuestra Casa, de Lieberman, lo cual puede imposibilitar su nombramiento como canciller por tercera vez.

El caldo en Irán

Ante esta nueva ofensiva del gobierno israelí sobre Irán, las reacciones del Parlamento persa frente a las conversaciones que sus diplomáticos mantienen con USA también resultan un dato.

El Parlamento de Irán exigió explicaciones al ministro de Relaciones Exteriores, Mohammad Javad Zarif, después de que acompañó a su homólogo estadounidense, John Kerry, en una polémica caminata.

Legisladores de línea dura en Teherán reaccionaron enfurecidos con las imágenes de ambos altos funcionarios en lo que parecía una caminata y conversación informal en las calles de Ginebra, durante negociaciones recientes.

Los airados parlamentarios afirmaron que no había razones concebibles para acercarse íntimamente a un representante de USA, a quien describieron como el "Gran Satanás".

Zarif insistió en que acompañar en una caminata a un homólogo es una situación completamente normal en el mundo de la diplomacia.