El papa Francisco es conocido por haber enviado dinero a los jubilados y los inmigrantes pobres, y por acariciar a los enfermos. Ahora resulta que por las noches podría salir de incógnito del Vaticano para distribuir limosnas entre los pobres.

Una fuente bien informada en Roma dijo a 'The Huffington Post' que "los guardias suizos confirmaron que el papa se ha aventurado a salir por la noche, vestido como un sacerdote regular, para reunirse con hombres y mujeres sin hogar".

El papa jesuita se aventuró a salir sin avisar cuando era arzobispo de Buenos Aires. Salía a hurtadillas por las noches para entregar pan a personas sin hogar, a veces se sentaba con ellos en la calle y comía con ellos para demostrar que eran amados por Dios, informa 'The Telegraph', y puede ser que siga haciéndolo siendo pontífice.

Esta intrigante posibilidad surgió de una entrevista a Konrad Krajewski, un arzobispo y confidente de confianza del papa Francisco, que es el 'Limosnero' del Vaticano, la persona que se dedica a la asignación de parte de la vasta riqueza de la Santa Sede a los pobres y marginados.

En una reciente entrevista con el portal uCatholic el arzobispo Konrad Krajewski dijo: "Cuando le digo 'Voy a salir a la ciudad esta noche', hay riesgo constante de que irá conmigo". Además, y él simplemente sonrió y agachó la cuestión cuando los periodistas le preguntaron a quemarropa si el papa lo acompañó a la ciudad.

No obstante, si el papa Francisco realmente sale del Vaticano por las noches, no será pionero. Se conocen historias sobre el papa Juan XIII que salía a escondidas para disfrutar de la belleza de Roma por la noche. También hay informes que dicen que el papa Pío XII se vestía como un franciscano durante la Segunda Guerra Mundial para ayudar a pasar el contrabando a la población judía de Roma.

Abusos sexuales

El papa Francisco volvió a tocar un tema que hasta hace poco era tabú en la Iglesia, al expresar su "compasión" por las víctimas de los abusos sexuales por parte de sacerdotes, durante el discurso que entregó a los obispos holandeses en visita ad limina, la que realizan al pontífice las conferencias episcopales de cada país cada cinco años.

"Deseo expresar mi compasión y asegurar mi oración a cada una de las víctimas de los abusos sexuales y a sus familias", dijo el Papa en su discurso.

El pontífice argentino les pidió además que sigan asistiendo a las víctimas "en el doloroso camino de curación, que conducen con valor".

Durante los últimos años, se han producido en Holanda cientos de denuncias por abusos sexuales contra sacerdotes.

En ese sentido, Jorge Bergoglio recordó a la Iglesia holandesa que "es importante e imprescindible" que exprese a las víctimas cercanía, esté disponible y le guíe si lo necesitan.

"Como padres, encuentren el tiempo necesario para acogerlos y escucharlos cada vez que lo pidan y no os olvidéis ir hacia aquellos que no se acercan", añadió.

En este contexto, el presidente de los obispos holandeses, cardenal Willem Jacobus Ek, subrayó que respecto del escándalo de los abusos del clero sobre niños, tras la publicación del Informe Deetman en 2011 disminuyeron las críticas de la opinión pública, porque la Iglesia manifestó una atención hacia las víctimas mucho más fuerte que en el pasado.