En Santa Fe
Bonfatti salió a combatir el fantasma de una intervención federal

Bonfatti salió a combatir el fantasma de una intervención federal
04/11/2012 | Por la crisis de seguridad, el líder del PJ provincial había mencionado la posibilidad de una intervención del Gobierno nacional. La reacción del gobernador.


La conferencia de prensa de Bonfatti luego de las declaraciones "desestabilizantes". | Fuente:Gentileza La Capital

En medio de la crisis de seguridad que atraviesa la provincia de Santa Fe, el PJ provincial mencionó hoy la posibilidad de una intervención federal, lo que provocó la reacción del socialismo, con el gobernador Antonio Bonfatti a la cabeza.

Esta mañana, el intendente de Venado Tuerto y presidente del PJ local, José Luis Freyre habló con el diario La Nación de una posible intervención del gobierno nacional en la provincia. "No hay control político sobre la policía de Santa Fe. Santiago del Estero fue intervenida por un conflicto mucho menor. Si el Gobierno nacional quiere intervenir la provincia parece que tiene elementos judiciales e institucionales como para hacerlo", dijo.

Enfurecido por sus declaraciones, el vicegobernador Jorge Henn salió a replicarle: "Nos parece de extrema peligrosidad pedir la intervención de la provincia, sería violar el espíritu de la Constitución”.

Cerca de la noche, el mismo gobernador, con los principales referentes de su partido repudió en duros términos las palabras del intendente justicialista.

Para Bonfatti, los dichos de Freyre "son de una extrema gravedad desestabilizantes". En conferencia de prensa, el gobernador expresó que las de Freyre "son declaraciones de extrema gravedad, desestabilizantes".

"Vamos a defender a este gobierno que es transparente. La voluntad política de los santafesinos no va a ser violentada y no lo vamos a permitir", afirmó el mandatario provincial.

El cruce de declaraciones de delicado contenido político se da en el marco de un escándalo por la vinculación de jefes policiales de Santa Fe al narcotráfico, lo que impulsó la aprobación de una ley de emergencia de seguridad e, incluso, un polémico discurso en el Congreso nacional que enfureció a toda la oposición.