La agenda porteña sigue danzando al ritmo del debate por la ley de medios. Los editores no dejan de mirar hacia el Consejo de la Magistratura, que aún debe nombrar quien será el juez que determine si el artículo 161 de la ley de Servicios de Comunicación Audiovisual (LSCA) es constitucional o no a la luz del Caso Clarín. Sin embargo, la Corte Suprema de Justicia concentra las miradas mediáticas porque rechazó intervenir como mediadora en las diferencias que existen en el Consejo entre los miembros oficialistas y opositores. A propósito, Clarín y La Nación amplifican en sus tapas que el tribunal desestimó las “presiones” del Gobierno nacional.
Adrián Ventura firma el artículo que se impone en lo más alto de La Nación y subraya que hay “malestar” entre los jueces porque consideran que se trata de una “‘presión inaceptable” que sólo busca “‘usar políticamente al tribunal’”.
Joaquín Morales Solá opina en el diario centenario y detecta que la máxima autoridad judicial “tomó prudente” distancia del “conflicto político” por la ley de medios. Al mismo tiempo se alerta porque “el problema de fondo es que Cristina Kirchner cree que la Justicia y la Corte Suprema son dependencias a su cargo”.
Cada vez que aborda este asunto, Clarín publica artículos sin firmas. Hoy tampoco se produce una excepción y el matutino cita una “fuente de la Corte” que reconoció: “‘A pesar de las presiones la Corte no se va a involucrar’”. El Cronista también se basa en “fuentes judiciales” para anotar la novedad. En segmentos menores, Página advierte que según “fuentes del máximo tribunal”, la Corte “podría pronunciarse” acerca del sistema de subrogaciones.
Desde otro ángulo, todos confirman que el titular de la Corte, Ricardo Lorenzetti, será reelecto en su cargo. Por lo tanto, se confirma la noticia que el domingo había destacado Perfil en lo más alto de su portada. Sin embargo, el anuncio es opacado por el foco en la LSCA. Milton Merlo, en Ámbito, describe cómo fue el panorama en el que se gestó la reelección.
En menor medida, informan que la procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Carbó, accedió al pedido del Gobierno y denunció penalmente a los cinco miembros opositores del Consejo de la Magistratura. Página es el único que amplifica la noticia a través del artículo escrito por el dúo Irina Hauser y Nicolás Lantos. Clarín y El Cronista realzan su preocupación porque la presentación cayó en manos del juez Luis Rodríguez, afín al kirchnerismo.
Además, los editores porteños distinguen que se conformó la Comisión Bicameral de Seguimiento de la Comunicación Audiovisual, que será presidida por el jefe de la bancada de Diputados del Frente para la Victoria, Agustín Rossi. Anotan cómo quedó conformada la minoría opositora y que el oficialismo propuso a la periodista Cynthia Ottaviano como defensora del Público. Para El Cronista, la Bicameral “debutó con polémica”.
Clarín y La Nación siguen concentrados en la 68ª Cumbre de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) que se realizó en San Pablo, en Brasil. Ambos matutinos anticipan que la entidad ratificó el envío de una misión al país para “defender la libertad de expresión” bajo el contexto de los “ataques” del Gobierno nacional a la prensa, sobre en la antesala del 7-D. Prevén que el equipo arribaría al país en los primeros días de diciembre.

Moyano vs. Recalde, el nuevo round mediático

El secretario general de la denominada “CGT Azopardo” renueva su presencia mediática al enfrentarse con su histórico asesor legal, el diputado Héctor Recalde, con el que guardaba una relación estrecha de más de veinte años. Puntualmente, atienden el “cruce” entre ambos en el marco de un plenario de comisiones en la Cámara de Diputados, donde se discutía la ley de Accidentes de Riesgo de Trabajo –criticada por Hugo Moyano–.
En líneas generales, todos remarcan una frase del camionero contra el diputado: “‘No podés ser tan servil al poder. Es una falta de respeto a los trabajadores, ¡y la historia los va a juzgar a ustedes!’”. Y agregan que le pidió renunciar a la presidencia de la Comisión del Trabajo. Los dos matutinos más vendidos del país recalcan esas palabras. Martín Bravo, en Clarín, subraya que Recalde “quedó en una posición incómoda desde que su hijo Mariano preside Aerolíneas Argentinas y Cristina Kirchner profundizó la ruptura con el camionero”. En La Nación, Gabriel Seud sentencia que el “delicado equilibrio entre ambos saltó ayer por los aires”. Por otro lado, señala que Recalde “no quiso polemizar con Moyano”, pero aseguró “que su líder es la Presidenta”. La periodista de El Cronista, Elizabeth Peger, registra que la relación “venía desgastada desde hacía tiempo”.
Desde Página/12 registran que ayer se dio “El divorcio entre Moyano y Recalde” y citan la voz de un “funcionario de la Casa Rosada”, que le apuntó al líder sindical porque “‘fue a hacer su show mediático ahora que trabaja para el Grupo Clarín’”. Al inicio de su artículo, Horacio Verbitsky sostiene: “Los insultos de Hugo Moyano a Héctor Recalde forman parte del desprecio por la verdad que oscurece gran parte del debate político en la sociedad argentina, donde la consecución de objetivos sectoriales o personales se coloca por encima del interés común y de la verdad de los hechos”. Con una pequeña dosis de ironía, Ámbito aclara que el “sketch de la pelea entretuvo a los diputados”.