Boca quedó complicado y se aleja de la lucha por el título, mientras que para los cordobeses todo lo contrario.

Si bien nada está dicho en el Torneo, no quedan dudas que es un golpe importante el que acaba de recibir Boca. Había sido Boca el que entró mejor a jugar el partido y tuvo su premio antes de lo previsto.

A los 3', un par de toques bien asociados entre los zurdos Sánchez Miño y Erviti, terminaron en los pies del uruguayo Santiago Silva que batió sin miramientos al arquero Olave.

El equipo de Julio Falcioni se trajo del vestuario un gol tempramero y lo tiró arriba de la mesa. Lejos de especular con el resultado, Boca siguió buscando y generó las mejores aproximaciones de la primera mitad. Silva estuvo muy movedizo por el sector izquierdo del ataque de Boca, el defendido por Turús, y tuvo chances de estirar cifras ante un Belgrano que quedó sacudido por el gol.

Boca se paró bien arriba del campo, se adueñó del control de la pelota y manejó exclusivamente el juego hasta los 20'. A los 23', cambió el panorama del primer tiempo. Sucedió que Belgrano, que no le había generado ningún incoveniente a Boca, empató a través de Sergio Rodríguez tras una mala cobertura defensiva de la defensa del equipo de Julio Falcioni. Sufre mucho la pelota detenida en contra.

El problema actual de Boca es que no tiene la solidez defensiva de antaño y eso le complica la existencia, porque no logra sostener el resultado favorable.

El resto de la primera parte se tornó más equilibrada, ya que el gol tonificó a los locales que buscaron un poco más comparando con lo sucedido en los primeros minutos. Belgrano aprovechó su momento y de entrada en el complemento mostró lo que dejaría la tarde.

Un gol a puro coraje de Aquino antes del minutos puso arriba en el marcador al local y dejó a Boca caminando por la cornisa. Belgrano jugó el mejor libreto que ejecuta cuando pasó a ganar el partido y de contragolpe enloqueció la frágil defensa de Boca y le metió el tercero con Farré, tras gran jugada de Melano.

Fue como que los delanteros del equipo de Córdoba corrían a otra velocidad en comparación con sus ocasionales rivales. Belgrano siempre estuvo más cerca de anotar que Boca porque en el segundo tiempo los de Falcioni ni se arrimaron al arco.

Además, sufrieron un gran golpe cuando Cellay vio la segunda amarilla y por ende la roja. Eso fue a los 23' cuando el partido estaba 2-1 en favor de Belgrano. Boca empezó bien y terminó mal. Belgrano lo contrario. Este resultado deja complicado a Boca y más lejos de la punta mientras que Belgrano se prendió en la pelea. Buen triunfo de Belgrano, un contragolpeador de pura cepa y que lo hace más que bien.