Ella participará por 1ra. vez en un mitin de la campaña electoral para las elecciones del domingo 07/10, para apuntalar en la recta final a Fernando Haddad, candidato del 'lulismo' a la alcaldía de la principal ciudad del país, Sao Paulo.
Después de 29 sesiones del juicio por el 'mensalão' en el Supremo Tribunal Federal (STF), la mayoría de la Corte escribió un capítulo importante en la historia política de Brasil: falló que el gobierno de Lula cooptó parlamentarios para formar una base parlamentaria aliada en el Congreso y compró esos votos para aprobar sus proyectos en la Legislatura.
 

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CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). El lanzamiento del nuevo libro de André Singer, "Los sentidos del lulismo - reforma gradual y pacto conservador", el 18/09 en la Universidad de São Paulo, con la participación de los profesores Brasílio Sallum Jr. y Francisco de Oliveira (Departamento de Sociología), Bernardo Ricupero, y en el rol de moderador Cicero Araujo (ambos del Departamento de Ciencia Política), expuso una teoría acerca qué significa el populismo, ilustrado por lo que él llamó "Espíritu de Sion."

Singer señaló las diferencias entre el programa de gobierno de Lula y el PT, respecto de la publicación de la Carta a los Brasileros, de julio de 2002, plataforma electoral del Partido dos Trabalhadores y de Lula.

Pero el lulismo todavía existe como concepto y por eso es interesante leer a Mario Frasson:

"En la historia republicana brasileña no hay sorpresas electorales profundas: São Paulo, Minas Gerais y Rio de Janeiro son los responsables políticos de los presidentes del país. Además de representar más del 40% de las elecciones brasileñas, estos 3 estados estuvieron, de alguna forma, al lado de 6 de los últimos 8 presidentes electos de manera democrática en Brasil (1945-2012), con la mayor excepción de Collor de Melo, electo en 1989, cuando São Paulo estaba dividido en siete candidatos.

Los números y la experiencia muestran que en estos estados están trazados los caminos sólidos para el Ejecutivo brasileño. A pesar de ser competidor en las federaciones del mundo -ejemplo mayor tal vez sean los Estados Unidos con sus “súper- estados”-, este tipo de fenómeno no dejar de reflejar sus perversidades para el buen funcionamiento de la democracia. La falta de movilidad de la innovación política tiene consecuencias de desequilibrio, hieriendo la capacidad de representación de las elecciones mayoritarias, las cuales ya son imperfectas en este ambiente por naturaleza. Traduciendo esto para el caso brasileño, una federación de veintisiete unidades en la práctica está en la obligación de escoger entre los nombres indicados por apenas tres de estas unidades.

Y los partidos políticos brasileños están más que consientes de esto pero no trabajan para repensar en los desequilibrios federativos, pero estudian los caminos de poder previsto por estos. Sin lugar para el azar, los dos mayores partidos brasileños eligieron como prioridad las elecciones municipales de este año en las capitales de estos tres estados, con un destaque mayor para São Paulo y Rio de Janeiro; en ambos casos, los discursos enfatizando en las elecciones nacionales de 2014.

(...) Recordando que, dentro del propio PT, la candidatura de Fernando Haddad no era deseada -al haber sido considerado inviable-, siendo que fue prácticamente impuesta por Lula en un momento de fuertes dudas sobre su lugar en la política; no seria sorpresa si el ex presidente usara el prestigio de un lulismo reforzado para garantizar su candidatura en 2014. Como señaló Fernando Henrique Cardoso, ex presidente y mayor líder del PSDB, hoy, la mayora amenaza electoral contra Rousseff no es la oposición, sino el propio Lula. (...)".

Sin embargo, resulta que el 'lulismo' luce agotado, probablemente porque el 'lulismo' ha exhibido un rostro terrible: la corrupción, contra la que tuvo que luchar Dilma Rousseff.

Acerca de la realidad del 'lulismo', escribió Fernando Rodrigues, desde Brasilia, para el diario Folha de S. Paulo:

"La fuerza del lulismo no funcionó hasta ahora en las capitales encuestada por Datafolha. La influencia del ex presidente Lula ha sido hasta ahora insuficiente para garantizar que los candidatos del PT despeguen.

En Belo Horizonte, Porto Alegre y Recife, los petistas no entusiasman al electorado. Ellos usan la imagen de Lula y de la presidente Dilma Rousseff, pero el efecto es mínimo o ninguno.

En São Paulo, el petista Fernando Haddad fue elegido directamente por Lula. Tiene un 18%. Nunca un petista tuvo una intención de voto tan baja en disputas paulistanas en los últimos 20 años en esta época de campaña. Nada impide la recuperación o hasta la victoria del candidato lulista, pero será un aumento sin precedentes en la historia electoral de la ciudad.

No fue porque sí que Lula desistió de viajar a otras ciudades en esta fase final. Se quedará en Sao Paulo para tratar de levantar la candidatura de Haddad. Es como si el PT diera las situaciones por perdidas en algunas capitales importantes.

En ciudades como Belo Horizonte, Fortaleza, Recife y Teresina, los petistas pueden quedar fuera de la segunda ronda. En algunos casos, la disputa estará cerrará ya el 7 de octubre, con algún opositor del PT obteniendo más de la mitad de los votos válidos.