La expulsión del gobernador de Monagas, José Gregorio Briceño, de las filas del Partido Socialista de Venezuela, acentúan la crisis. En la región, Rafael Correa busca boicotear (en soledad) la Cumbre de las Américas. Hugo Chávez espera volver este fin de semana a Venezuela, desesperado por entrar en la contienda electoral.
 

“Se alborotan los alacranes”, así está titulada la editorial del diario Tal Cual de este jueves, escrita por el periodista Teodoro Petkoff, en donde se refiere a la expulsión de José Gregorio “El Gato” Briceño, gobernador de Monagas, de las filas del Partido Socialista de Venezuela.

“El estallido abierto podría explicarse por dos causas, al menos. Por un lado, demuestra, por razones obvias, el grado de erosión del liderazgo de Chávez; por otro, muestra la resistencia que genera la aspiración, ya inocultable, de Cabello de hacerse con la herencia de Chávez”, señaló.

En tal sentido, “algo deben saber, o quizás intuir, en la cúpula del PSUV, con respecto a la salud de su jefe, que los demonios han comenzado a saltar”.

Es que la ausencia de Chávez, sumada a su personalismo extremo, está mostrando que las que en un principio eran pequeñas fisuras, ya se convierten en grietas insondables al interior del movimiento bolivariano.

Los rayos de cobalto de la radioterapia, a la que se sometió tras la tercera operación quirúrgica por un tumor cancerígeno en la zona pélvica, por fuerza tienen que fortalecer la salud de Chávez, puesto que el panorama en el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) no se presenta nada tranquilo. Al contrario, la frágil unidad de la organización amenaza con hacer agua.

El descontento de los sectores chavistas de base tiene que ver con los nombramientos "a dedo" de los candidatos a gobernadores. Ninguno de los 16 gobernadores chavistas están seguros de si se presentarán a la reelección, porque dependen de la decisión de Hugo Chávez, enfermo en Cuba.

Y lo más preocupante para estos gobernadores es que el mandatario hasta ahora sólo ha elegido a gente de su entorno más cercano: ha presentado las candidaturas a gobernador del vicepresidente, Elías Jaua, para el Estado de Miranda; del canciller, Nicolás Maduro, para Carabobo; del ministro del Interior, Tarek el Aissami, para Táchira; de Luis Reyes Reyes, para Lara, y de Francisco Arias Cárdenas para Zulia. Aparentementem la decisión del mandatario se debe a la baja imagen de los gobernadores en sus distritos.

En este marco, al interior de chavismo hay una corriente que se quiere oponer a los designios del mandatario. La corriente, a cargo del ex diputado del PSUV, Edwin Zambrano, pide la revocación de las candidaturas elegidas por Chávez. "Así como Chávez acaba de hacer un consejo de Ministros desde Cuba, también debería dirigirse al partido y revocar esas candidaturas que decidió a dedo. Debería llamar a un proceso interno como las primarias", dice Zambrano.

El exdiputado chavista tiene dudas sobre la capacidad real de Chávez de continuar al frente del PSUV y del Gobierno, a la vista de la evolución de su enfermedad. "Hay una concepción equivocada en la dirección del partido. Ellos piensan que la magnificación de Chávez es la clave para continuar con el proceso, pero no es así. La mayoría de los venezolanos quieren una vida política más democrática, unos liderazgos menos personalistas", agregó. A su juicio, el PSUV es "apenas una maquinaria electoral, en la que los militantes no pueden ejercer sus derechos políticos. Hay un líder que decide todo".

El gobernador del Estado de Monagas, José Gregorio Briceño (oficialista), se enfrentó con el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, por la contaminación del río Guarapiche a causa de un derrame de petróleo. Cabello ocupa el segundo lugar, después del vicepresidente, en la línea sucesoria de la Presidencia, según la Constitución. Hace tres años fue derrotado en Miranda por el actual gobernador y candidato único de la oposición, Henrique Capriles.

La situación obligó que desde Cuba, Chávez les llamara la atención y reclamara "lealtad" al proceso "a pesar de los fallos". "No se dejen engañar por las trampas de la burguesía. Hay que ser leales al Gobierno y a la batalla victoriosa de octubre", les recriminó.

Puertas afuera

Las grietas al interior del chavismo en Venezuela tienen su reflejo en el exterior, donde la propuesta de Rafael Correa, presidente de Eecuador, de boicotear la Cumbre de las Américas que se realizará en Cartagena, no ha calado y ha dejado al ecuatoriano en soledad.

A pesar de no encontrar apoyo, Correa, que sigue intentando ser el espadachín más chavista que Chávez en la región, anunció este miércoles que no asistirá a la Cumbre de las Américas, que se celebrará en la ciudad de Cratagena - Colombia el 14 y 15 de abril. La decisión la toma el gobierno ecuatoriano en protesta por la no invitación a Cuba a participar del encuentro.

El país sudamericano pertenece a la llamada Alianza Bolivariana o países del ALBA (Venezuela, Ecuador, Bolivia, Nicaragua y tres naciones caribeñas), liderada por Chávez. Correa manifestó que "personalmente ya no estoy dispuesto a volver a participar en estas cumbres, en las que no se debaten los problemas de los pueblos latinoamericanos", dijo el mandatario desde Ankara, donde está de visita oficial.

Cuba nunca ha participado en la Cumbre de las Américas, pero este año, los siete países del ALBA amenazaron con no acudir este año a la cita de Cartagena de Indias el mes que viene. Para el mandatario ecuatoriano USA boicoteó la invitación a Cuba.

"Se organiza una cumbre para los países latinoamericanos y se excluye a un país latinoamericano: Cuba no puede participar por el boicot estadounidense", puntualizó Correa. Lamentablemente para los bolivarianos en la región, ningún otro mandatario del ALBA se unió a la cruzada de Correa, mostrando que también en Latinoamérica se presiente que la ausencia de Chávez podría volverse definitiva en poco tiempo.

Caro

Con las divisiones del movimiento bolivariano dandole dolores de cabeza, la recuperación de un Chávez desesperado por volver a la arena política venezolana podría no concretarse y redundar en los costos para los venezolanos.

La comitiva fija que rodea al presidente Hugo Chávez desde el 24 de febrero pasado, cuando este viajó a La Habana para extirparse un segundo tumor en la pelvis, ronda las 250 personas entre asistentes, seguridad, familiares, funcionarios y operarios de Venezolana de televisión.

El dato fue brindando por el diputado opositor Carlos Berrizbeitia, integrante de la comisión de Ciencia, Tecnología e Innovación del Parlamento, quien estimó que el Estado venezolano ha tenido que desembolsar hasta la fecha alrededor de 3,7 millones de dólares.

"La crítica no es por los costos de la enfermedad del presidente, sino por su insistencia de ejercer el cargo desde La Habana", aclaró Berrizbeitia. El legislador sostiene que trasladar el palacio de Miraflores (sede del gobierno) a Cuba, con todo y los recurrentes viajes de ministros a la isla para reuniones especiales, costarían al país diariamente entre 200 mil y 300 mil dólares, dinero que —aseguró— el Estado podría ahorrarse si Chávez delegara sus funciones en el vicepresidente Elías Jaua.

La bancada de la oposición en la Asamblea Nacional prevé solicitar una rendición de cuentas al Ejecutivo, una vez retorne al país tras su período post-operatorio en La Habana. "En la Memoria y Cuenta de los ministerios tienen que estar sustentados estos gastos. Enviaremos una información al Despacho de la Presidencia para que se nos informe", afirma el legislador. Por ahora, los datos que maneja son producto de su investigación particular, extraoficiales, por los que asegura también que la comitiva ocupa dos pisos de un hotel en Cuba y se mantiene permanentemente un equipo de Venezolana de Televisión en la isla para hacer transmisiones en vivo.

En números. ¿De dónde salen los recursos de Chávez en La Habana? Hasta la fecha el Parlamento no recibió ninguna solicitud de crédito adicional específica para cubrir los costos de la enfermedad del jefe de Estado, por lo que Berrizbeitia estima que los recursos salen principalmente de las partidas del Despacho de la Presidencia y la Cancillería. En su última aparición, Chávez anunció que se recupera, y que planea regresar a Caracas el fin de semana.