La Cooperativa Unión de Trabajadores Sanluiseños (Utrasa) firmó ayer un contrato con el Gobierno provincial, por el cual fabricará 100 mil pares de zapatillas que serán distribuidas entre alumnos de bajos recursos de toda la provincia. Según adelantaron los dirigentes de la entidad, con las utilidades que les dejará el negocio comprarán siete máquinas para marroquinería que les permitirán diversificar su actividad con la fabricación de carteras para dama.
La empresa recuperada por sus trabajadores firmó ayer el anhelado convenio con el Gobierno provincial, merced a un compromiso que había asumido el gobernador Ricardo Colombi con los dirigentes de la entidad sanluiseña. Mediante el acuerdo, la planta textil fabricará 100 mil pares de zapatillas de lona en un plazo de 60 días, que se-rán distribuidas por el Ministerio de Edu-cación a estudiantes de bajos recursos de todos los niveles que concurren a escuelas provinciales.
El presidente de Utrasa, Ricardo Espínola, explicó  que en los próximos días se acreditará un adelanto del 25% del total del monto del negocio (que ronda los $2,6 millones), dinero con el cual se comprará los materiales y se comenzará con la confección del calzado. “Estimamos que vamos a poder cumplir tranquilamente con el plazo para la entrega”, señaló el dirigente, quien comentó que las zapatillas podrán ser confeccionadas íntegramente en la planta industrial de San Luis, ya que la cooperativa cuenta con la ma-no de obra y maquinaria acordes para este trabajo. Además, agregó que las entregas serán en tandas de 10 mil a 15 mil pares, “pa-ra que el Gobierno vaya repartiendo el calzado a los chicos de las escuelas”, explicó.
Sin embargo, el negocio con el Gobierno provincial permitirá a Utrasa adquirir máquinas que ayudarán a diversificar su actividad con el rubro marroquinería. En este sentido, tal como publicó El Litoral se-manas atrás, a fines del año pasado la empresa sanluiseña acordó confeccionar y fabricar carteras para una cadena de tiendas de accesorios para mujeres que tiene más de 150 locales en todo el país. Si bien el trabajo co-menzó, ya que la cadena aportó algunas má-quinas y se están confeccionando entre 50 y 70 carteras diarias, el objetivo de los dirigentes de Utrasa es llegar a las 1.000 unidades por día.
Para ello, Espínola adelantó que la entidad utilizará parte de las utilidades del negocio con el Gobierno para invertir en siete máquinas industriales de marroquinería. Una vez que la empresa textil cuente con esta maquinaria, se capacitará al personal que se prevé contratar para hacer frente a la creciente demanda que tiene la cooperativa. “Hay más de 70 inscriptos para empezar a trabajar, pero no podemos darles un lugar porque todavía no tenemos las máquinas; una vez que las tengamos, se va a capacitar al personal y vamos a tener mano de obra calificada para poder atender a los clientes actuales y ampliar el rubro marroquinería”, estimó el dirigente cooperativista.
Con el nuevo rubro, la empresa recuperada por sus trabajadores prevé incorporar un centenar de nuevos operarios. “Seguramente vamos a superar los 300, que es el número de empleados que tenía la fábrica Gatic en su mejor momento”, dijo Espínola. En este sentido, el dirigente adelantó que se podría conformar la creación de un instituto de capacitación para personal de la fábrica sanluiseña, ante la creciente demanda de productos y la aparición de nuevos clientes a quienes abastecer.