Política
El antichavismo se une para no repetir el error de la oposición en la Argentina

28/01/2012 | Por primera vez, los candidatos de los sectores críticos al oficialismo se medirán en una primaria. Buscan evitar “la experiencia argentina”. Apoyo electoral y programa común para las elecciones de octubre.


Por Leandro Dario



 

Todos unidos triunfaremos. Los seis candidatos que buscan derrotar a Hugo Chávez se mostraron juntos el lunes en Caracas. El presidente enfrentará una elección en la que se plebiscitará su gobierno.
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A ocho meses de las elecciones que pueden marcar un quiebre en Venezuela, los antichavistas no quieren emular a Hermes Binner, Ricardo Alfonsín, Eduardo Duhalde y Alberto Rodríguez Saá y se unirán para desterrar del poder al presidente venezolano Hugo Chávez. Ante el temor que el líder bolivariano obtenga un triunfo tan rotundo como el de Cristina Fernández de Kirchner en la Argentina, los precandidatos presidenciales opositores se medirán el 12 de febrero en las elecciones internacionales de la Mesa de Unidad Democrática (MUD), la plataforma pluripartidista que busca terminar con 13 años de chavismo.

“Nos pareció trágico lo que hizo la oposición en la Argentina. No queremos repetir esa experiencia. Es importante que vayamos unidos a las elecciones. Tenemos diferencias importantes con los otros candidatos, pero más allá de eso hay un sentimiento de unidad y esperanza”, confió a PERFIL Pablo Medina, candidato del Partido Laborista, al tiempo que calificó a CFK y Chávez de “nepotistas que buscan mantenerse en el poder”. Aunque Medina es un sindicalista de izquierda que pasó por el chavismo, no duda en apoyar al resto de los candidatos de la MUD, incluso a los de derecha.

En tanto, el gobernador de Miranda, Henrique Capriles Radonski, el favorito en las encuestas, cree que la unidad debe trascender la coyuntura electoral. “Los venezolanos estamos llamados a construir una unidad superior. En Venezuela tenemos una unidad que viene funcionando desde hace tiempo, y se debe fundamentalmente a que padecemos de los mismos problemas. Juntos debemos construir la Venezuela del progreso”, explicó a este diario el joven de 39 años.

El primer paso para consagrar una candidatura común lo dieron el lunes, tras firmar en un acto público el documento llamado “Lineamientos para el Programa de Gobierno de Unidad Nacional” (2013-2019), que busca consensuar las líneas básicas de una eventual gestión antichavista. Con cuatro debates televisados, en los que los candidatos contrapusieron sus propuestas, la oposición parece haber aprendido las lecciones tanto de la derrota en las presidenciales de 2006, en las que se presentaron 14 candidatos, como del estrepitoso fracaso del antikirchnerismo.

Ensalzando la necesidad de mayor unidad, Leopoldo López, uno de los líderes de la MUD, anunció este martes que declinará su candidatura y apoyará a Capriles Radonski, el joven gobernador de Miranda. Así, tan sólo quedan cinco dirigentes que aspiran a liderar al antichavismo en las elecciones del 7 de octubre, que se vislumbran como un referéndum del gobierno de Chávez.

Además de Capriles y Medina, luchan por esa nominación Diego Arría, ex diplomático, María Corina Machado, candidata independiente que fue la más votada en las legislativas de 2010, y Pablo Pérez, gobernador del estado de Zulia.
Con el 36% de intención electoral, Capriles, de 39 años, fue descripto por la revista Foreign Affairs como el líder de la nueva oposición venezolana. “Nadie puede acusarlo de pertenecer al pasado. Se apoya en la reconciliación política, la lucha contra el crimen y los programas sociales menos politizados”, anunció la revista.

Ramón Guillermo Aveledo, secretario ejecutivo de la MUD, señaló que la interna antichavista se trata de una “votación abierta”, que buscar imitar a las primarias de los Estados Unidos, donde se espera que vote casi un 10% del censo electoral, que agrupa a 18 millones de venezolanos. Para eso, instalarán unas 7 mil mesas en alrededor de 3 mil centros de votación en el país y en 89 ciudades del mundo. Pero el plan de la oposición no sólo está destinado a ocupar el Palacio de Miraflores, sino también busca erradicar al chavismo de todas las alcaldías y gobernaciones del país, donde también presentarán candidatos únicos que saldrán de las primarias.

“La unidad está garantizada”, confirmó ayer Pablo Pérez, segundo en la intención de voto. Con un espíritu de cohesión nunca antes visto, el antichavismo marcha confiado a unos comicios que se vislumbran inciertos, ante el aumento de popularidad de Chávez, que rozó el 55% durante la batalla contra su enfermedad. Con la unidad como bandera, buscarán reeditar la campaña del referéndum que se celebró en 2007 para reformar la Constitución en 2007, en el que el “no” se impuso con el 50,07% de los votos. Esa noche, se vio una imagen inédita en Venezuela desde 1999: Chávez aceptó por cadena nacional que la derrota era irreversible.