Es el estilo del kirchnerismo que Cristina ha estrechado aún más. Las decisiones que se están tomando en el aspecto económico de acá al 10 de diciembre, fecha del inicio formal del segundo mandato, serán todas profundas, poco meditadas y surgidas de un estrecho círculo.

Pocos tuvieron el privilegio de saber qué se iba a anunciar: los que accedieron a él, lo tuvieron con un par de horas antes, cuando llegaron los llamados a concurrir al microcine del ministerio de Economía.

Las empresas de servicios públicos carecieron de información previa y carecen aún de los datos necesarios para saber cómo se implementará la historia de las excepciones y el envió de declaraciones juradas.

Pero tienen claro que tendrán un verano movido, al igual que varios funcionarios que deberán pasar los dos primeros meses de 2012 en sus casas de Puerto Madero o de countries trabajando en la implementación de los recortes, atento a que es un período donde “la gente” está de vacaciones y puede sentir menos el inicio del importante ajuste en varios de sus gastos normales.

La confusión también reinó entre miembros de la administración y sus seguidores en las redes sociales, lugares que no descuidan pero que ayer encontró más silencios que caracteres.

Uno de los pocos que se atrevió a mencionar el asunto allí fue Amado Boudou, quien posteó 3 mensajes en Twitter desde su cuenta @boudouamado

Según Favstar.fm -página que mide los retuiteos- consiguió 380 RT de sus tres mensajes sobre el asunto, algo que sorprendió en las propias filas del ministro y futuro vicepresidente.

Los 139.000 seguidores de su cuenta leyeron su explicación de por qué el Estado –y este Gobierno- subsidió a los más ricos durante 8 años y hoy, son los malos de la película que se está rodando, antes de que Cristina asuma otro mandato.

“En su momento fue necesario que el Estado ayude a todos. Por suerte, gracias al crecimiento, hay sectores que ya no necesitan subvención”, justificó Boudou a la “ayuda” que durante 7 años llegó a sectores que no lo necesitaban.

En el oficialismo también se apoyan en mediciones donde el apoyo a la quita de los subsidios ronda el 80%. Y en esos “papers” se justifica que la medida de ayer tiene un efecto “cuantitativo y cualitativo”. Cuantitativamente porque es un monto importante del total de subsidios y cualitativamente, por lo simbólico de los sectores a los que se quita el subsidio, supuestamente no cultores y no votantes del “modelo” vigente.

Pero el Gobierno no abandona las luchas que lleva a cabo el todoterreno Guillermo Moreno, tan lejano a la jubilación como funcionario nacional como a los buenos modales.

Las intervenciones del secretario de Estado ya forman parte del anecdotario de empresarios y banqueros. Y ahora, se suma el de las financieras, donde dos días atrás llegó la amenaza telefónica del “castigo divino”.

El ultimátum de Moreno a las casas financieras fue para bajar el valor del dólar paralelo. Y si eso no sucedía de acuerdo a su orden, una jueza con bastantes años de aceitado vínculo con el Poder Ejecutivo, los iba a visitar.

Lo que se dice, una prolija división de los poderes.