DISPUTAS POR EL NEGOCIO DE LOS MEDICAMENTOS
Aizcorbe, el curioso nexo entre el farmacéutico y Roemmers

Aizcorbe, el curioso nexo entre el farmacéutico y Roemmers
07/10/2011 | ¿Es posible que, detrás de la reivindicación de los intereses del pequeño farmacéutico, se encuentre la defensa de la tasa de rentabilidad de Roemmers y otros grandes laboratorios nacionales? No estaría mal un buen debate.

 La organización de los farmacéuticos argentinos es compleja. Conviven muchas entidades, cada una representativa de un grupo de profesionales:

 


> Confederación Farmacéutica Argentina,

> Federación Argentina de Cámaras de Farmacias,

> Asociación Argentina de Farmacéuticos de Hospital,

> Asociación de Farmacéuticos Formulistas Argentinos,

> Asociación de Farmacias Mutuales y Sindicales de la República Argentina,

> Farmacéuticos sin Fronteras de Argentina, etc.

A fines de noviembre/inicios de diciembre de 2010, la Confederación Farmacéutica Argentina (Cofa) eligió al Colegio Farmacéutico de Mendoza para que la presidiera.

El titular del organismo profesional mendocino, Ricardo Aizcorbe, asumió la representación de la Cofa (quien a fines de mayo había sido elegido presidente de la Federación Panamericana de Farmacia, en Porto Alegre, Brasil), y comenzó lo que él entendió es una defensa de la profesión del farmacéutico como profesional independiente, o sea la farmacia tradicional.

Ricardo Miguel Aizcorbe es un farmacéutico egresado de la Universidad Juan A. Maza, ex director de Salud y Medio Ambiente, ex secretario de Gobierno y ex concejal en el municipio mendocino de Maipú, ex diputado provincial, ex titular de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados provincial, y él afirma que hizo contribuciones notables a la mejora del sistema de salud mendocino, mientras que sus críticos afirman que si algo cambió por gestión de Aizcorbe, es más que imperceptible. En fin... controversias que no hacen al fondo de la cuestión.

Quien secundaba a Aizcorbe en Mendoza, Jorge Jakubson, ya había explicado el enfoque:

“Argentina es uno de los pocos países del mundo donde la venta de medicamentos fuera de farmacias es un jolgorio. En países del primer mundo no ocurre esto”.

No es cierto. La venta de especialidades medicinales online, con entrega postal a domicilio, fue motivo de abuso, escándalo y restricción en USA, por ejemplo. Pero el concepto es válido para alertar sobre los excesos.

En forma simultánea, Aizcorbe inició una confrontación contra las empresas que tienen cadenas de farmacias. La más grande en el país es Farmacity, y por eso el diario La Nación habló de "la guerra entre Farmacity y la Confederación Farmacéutica Argentina (COFA)", tras la decisión de Aizcorbe de denunciar a la cadena controlada por el grupo Pegasus ante la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia.

El enfoque de Aizcorbe es similar al de los pequeños comerciantes cuando avanzaban los supermercados. Pero luego aparecieron los comerciantes chinos y se quedaron con una gran porción del negocio de los supermercados, desvirtuando todo lo que sostenían los dueños de despensas y rotiserías.

Aizcorbe defiende el statuo-quo en base a la regulación y la restricción pero no se plantea si el consumidor ha evolucionado respecto de la farmacia tradicional de hace 50 o 70 años, y no explicita cuál es el modelo que él propicia para contener a consumidor del siglo 21.

Aizcorbe más bien pareciera prescindir del consumidor, ignorando que hoy día es un protagonista decisivo de toda la actividad económica.

Pero esa tampoco es la cuestión de fondo. Hay una situación mucho más importante en el enfoque de Aizcorbe: la defensa directa o indirecta de la tasa de rentabilidad de los grandes laboratorios nacionales como Roemmers. Sucede que el discurso de Aizcorbe contra las cadenas de farmacia contiene una extraordinaria coincidencia estratégica con los intereses de Roemmers, por ejemplo.

Roemmers se considera afectado por un nuevo sistema de comercialización que, por su volumen de compra, se considera en el derecho de modificar la tasa de rentabilidad tradicional del laboratorio. En cambio, en el sistema tradicional, que defiende Aizcorbe, la tasa de rentabilidad abusiva del laboratorio no estaba en discusión.

Volviendo a la cuestión del consumidor, hasta la fecha nunca se escuchó la opinión de Aizcorbe sobre los precios abusivos de los medicamentos y cómo reformular un esquema para el consumidor abandone su posición de rehén de los fabricantes (situación que no cambió con la introducción de los genéricos que impulsó Ginés González García porque el sistema de comercialización no fue modificado).

En fin, hay una disputa muy interesante en marcha pero es importante ubicar al debate en su justo término.