EN DIPUTADOS
La Ley de Tierras fisura a la oposición

La Ley de Tierras fisura a la oposición
07/09/2011 | "Demasiado delicado para sacarle rédito electoral" o ¿"demasiado costoso para "cajonear""? Los análisis de la oposición frente al apuro del oficialismo en Diputados, bajo la presión de Cristina Fernández, para sancionar la Ley de Tierras antes del 23 de octubre, marca varios quiebres.

Coordinar una estrategia común frente a un oficialismo que se presenta reforzado por las últimas primarias de agosto está causando serios problemas.A poco de la reanudación de las tareas legislativas, el oficialismo se garantizó para la sesión en la Cámara de Diputados un temario sin temas conflictivos e intentar apurar, mañana, el dictamen del proyecto de ley que restringe la venta de tierras a los extranjeros, una iniciativa que, anteayer, volvió a reclamar la Presidente Cristina Fernández.

Sin embargo, la oposición busca a tientas una estrategia común frente al kirchnerismo. Ayer, en una reunión en el despacho de Ricardo Gil Lavedra, jefe del bloque radical, distintos referentes opositores coincidieron en intentar demorar en las comisiones la sanción del proyecto de tierras.

"Es un tema demasiado delicado y denso para apurarlo; menos aún para que el Gobierno le saque rédito electoral antes de los comicios presidenciales", coincidieron los allí presentes, según el diario 'La Nación'.

La idea es prolongar al máximo el debate de la iniciativa en las comisiones de Asuntos Constitucionales y de Agricultura, ambas comandadas por la oposición, hasta después del 23 de octubre.

Sin embargo, la estrategia no parece tan sencilla de consumar. Las diferencias internas y la resignación que predomina en varios opositores ante la posibilidad de un nuevo triunfo kirchnerista en octubre no los hace muy optimistas.

Las fisuras comienzan a asomarse: Graciela Camaño (Peronismo), presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales, hizo saber a sus pares opositores que ella no quiere correr sola con el "costo político" de "cajonear" el proyecto.

"Graciela cree que el proyecto del Gobierno es malo porque, así planteado, beneficiará a los grandes pools sojeros. Pero está dispuesta a dar el debate", deslizan en su entorno. Con este guiño, Vilma Ibarra (Nuevo Encuentro) presidente de la Comisión de Legislación General y promotora de la iniciativa oficialista, cree que mañana finalmente podrá dar a luz el dictamen esperado por la Casa Rosada.

A las disidencias internas dentro del llamado Grupo A (que integran la UCR, la Coalición Cívica, el Peronismo Federal y Pro) se suma la posición equidistante que muestran los bloques miembros del Frente Amplio Progresista: el Partido Socialista, GEN y Proyecto Sur. Este sector, más conciliador y menos confrontativo con el Gobierno, tiene algunas disidencias puntuales con el proyecto oficial sobre venta de tierras, pero está dispuesto a facilitar su tratamiento.

De esta manera, si bien la oposición todavía mantiene cierto predominio numérico en la Cámara baja, lo cierto es que el equilibrio real de fuerzas cambió. El oficialismo, envalentonado con la victoria enn las primarias de agosto y convencido de que mejorará todavía más su desempeño en octubre, se apresta a retomar las riendas de la Cámara de Diputados.

“No puedo pensar que, cualquiera que sea el partido, haya diferencias en torno a esto”, volvió la Presidente sobre la cuestión en su discurso en Tecnópolis, ya al tanto de las diferencias.

El tucumano Juan Casañas, titular de la comisión de Agricultura, dijo a 'Clarín', que su posición personal es postergarlo hasta después de las elecciones: “Benetton compró las tierras hace 25 años y el kirchnerismo no hizo nada durante mucho tiempo . Ahora sería bueno un debate serio y sin urgencias electorales”.

En la agenda legislativa inmediata figuran 3 temas clave para el kirchnerismo, además del proyecto de ley de tierras: el presupuesto 2012, la prórroga de la ley de cheque y de la emergencia económica.

En estos temas la oposición también muestra sus disidencias internas. Tanto los bloques más críticos como los progresistas agrupados en el Frente Amplio podrían facilitar la sanción en general de la iniciativa, pero otros diputados -los futuros "halcones" del Congreso- anticiparon que no convalidarán un nuevo proyecto con premisas falsas o subestimadas, como lo fueron los anteriores presupuestos kirchneristas..