TERREMOTO + TSUNAMI + ALERTA NUCLEAR EN JAPÓN
Nueva explosión, alarma radiactiva y éxodo en Tokio

Nueva explosión, alarma radiactiva y éxodo en Tokio
15/03/2011 | La alarma de un desastre nuclear crece en torno a la central de Fukushima, afectada en 4 de sus 6 reactores por el terremoto que devastó el país el viernes 11/03. Un incendio se ha desencadenado en el reactor 4, aunque ya está controlado, mientras que en el Nº2 se produjo una explosión en torno a las 6:00 hora local.

Los problemas continúan: el agua utilizada para rebajar la temperatura en el interior está sufriendo el efecto contrario y podría estar empezando a hervir, según la agencia de noticias Kyodo.

La radiactividad en la central nuclear de Kanagawa, en la prefectura homónima del este de Japón, es 9 veces superior a los niveles habituales, según la agencia de noticias Kiodo.

Kanagawa sería la 5ta. planta afectada por el terremoto de 8.9º en la escala de Richter que el pasado viernes 11/03 sacudió la costa noreste del país, después de los problemas registrados en las 2 centrales de Fukushima (este), la de Onagawa (prefectura de Miyagi, al noreste), y la de Tokai (en Ibaraki, al norte).

En Fukushima, las autoridades de Japón han advertido de un posible aumento de la radiación tras un incendio y una explosión en la central nuclear, en torno a la cual se ha declarado una zona de exclusión aérea de 30 kilómetros, después de que el sábado los habitantes de la zona fueran evacuados.

Una nueva explosión ha sacudido la central de Fukushima, esta vez en el reactor número dos. Horas después, el Gobierno nipón reconoció lo alarmante de la situación en la nuclear. Además informó de que otro reactor, el Nº 4, ha sufrido un incendio, ya controlado, y reconoció que los niveles de radiación en la zona han aumentado "considerablemente".

"El peligro de más fugas de radiación está creciendo", advirtió el 1er. ministro, Naoto Kan, al tiempo que instó a la población a "actuar con calma". Poco después y una vez controlado el fuego, las autoridades japonesas han informado de que los niveles de radiación han comenzado a descender.

El 1er. ministro Kan anunció nuevas evacuaciones, la de los residentes en torno a 10 kilómetros de la central Fukushima I ya está completada; los que viven entre 10 y 20 Km. serán rescatados en breve; y los que residen entre 20 y 30 kilómetros de la central no deben salir a la calle.

El portavoz del Ejecutivo que sucedió a Naoto Kan en la tribuna de oradores pasó del mensaje de calma de los días previos a inequívocas señales de alarma. "Cuanto más lejos estén de la central, más seguros estarán", advirtió Yukio Edano, que apareció ante las cámaras con muestras evidentes de sudor en la frente.

La explosión en el Nº2 habría dañado la vasija de contención del reactor, según admitieron las autoridades. La vasija o muro de contención es la estructura más cercana al reactor. Se teme que la deflagración haya afectado a parte del sistema de control de presión del reactor y que pueda haber provocado la fuga.

En esta nueva explosión, sí se ha dañado la vasija, compuesta de acero y hormigón y con forma de bombilla. Está diseñada para prevenir posibles fugas radiactivas. En las anteriores explosiones registradas en Fukushima la vasija que protege al reactor quedó intacta.

El Gobierno japonés admite que "puede haberse producido una fuga de materiales radiactivos", especialmente por causa del incendio, "que pueden afectar a la salud humana".

Hay 50 operarios trabajando en la central, son los únicos que no han sido evacuados. Todo está en sus manos: tienen que refrigerar las piscinas de los reactores.

En las centrales había 800 operarios trabajando, pero la compañía eléctrica que gestiona la central -Tokyo Electric Power Co. (Tepco)- ha pedido que se retiren todos menos ese medio centenar.

Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud ha querido enviar un mensaje tranquilizador: "Japón está tomando las medidas de salud públicas adecuadas para proteger a la población de la radiación", cita la agencia Reuters.

Además, añadió que dicho organismo no ha recibido ninguna petición de ayuda por parte de Japón, aunque sus expertos en radiación están alerta.

La población de Tokio comienza a organizar evacuaciones a medida que se multiplican las advertencias sobre la llegada de radiación a la ciudad. Muchos ciudadanos han optado por hacer acopio de provisiones por temor a quedarse aislados en casa. En algunas tiendas comienzan a escasear radios, linternas, velas, bidones de combustible y sacos de dormir.

La alcaldía de Tokio anuncia que ha detectado radiación en la ciudad. Se han registrado altos niveles de celsio y yodo, pero todavía no está claro si está relacionado con la planta de Fukushima. En la ciudad de Saitana, muy cerca de Tokio, el nivel de radiación supera 40 veces el registro habitual.

El gobernador de Tokio, el ultraconservador Shintaro Ishihara, se disculpó hoy por haber afirmado que el devastador terremoto del día 11 y el tsunami posterior fueron un "castigo divino" por el egoísmo existente en Japón.

El controvertido alcalde, de 78 años, afirmó el lunes 11/03 a los periodistas que "la política japonesa está teñida de egoísmo y populismo. Necesitamos utilizar el tsunami para barrer el egoísmo, que ha oxidado la mentalidad japonesa durante mucho tiempo. Creo que (el desastre) es un castigo divino, aunque lo siento por las víctimas", añadió.

"Lo retiro y ofrezco mis profundas disculpas", dijo Ishihara, quien, en declaraciones recogidas por la agencia Kyodo, reconoció que debería haber pensado en los sentimientos de las víctimas.