La carrera presidencial para 2011 ya empezó. No importa que tengan que pasar doce meses hasta el próximo octubre, momento de la elección; la Asamblea anual de la AFA del jueves fue el punto de partida para que se perfilaran los grupos. Esos que, en un año, intentarán quedarse con el premio mayor: el sillón de Julio Grondona. Y, de entrada nomás, todos tienen un aperitivo para ir midiendo fuerzas: los posicionamientos que se darán alrededor de la confirmación de Sergio Batista.

Checho, la excusa. Antes de partir a Zurich, donde pasará la semana próxima, el presidente designó de palabra a quienes formarán la nueva Comisión de Selecciones Nacionales, encargada de proponer el nombre del próximo entrenador. Allí puede saltar la primera chispa: a pesar de que Grondona había anunciado que los nuevos integrantes propondrían al Comité Ejecutivo el apellido indicado, su amplitud no fue tal. El hombre que “fuma abajo del agua”, tal como lo definió un directivo opositor al grondonismo, eligió personas leales a sus pensamientos. En otras palabras: puso a dedo a dirigentes que dirán que el más lindo, el más bueno y el mejor para el cargo es Batista. El que quiere Grondona. Por eso, aunque no se haya oficializado, es una fija que Luis Segura (Argentinos), Juan Crespi (Boca), Germán Lerche (Colón) y Mario Contreras (Godoy Cruz) serán los que compongan la comisión. Con dos agregados: en la AFA aseguran que también estarán Diego Turnes (vice de River) y Julio Grondona (Arsenal). ¿Grondona? Tal cual: el presidente de la AFA propuso poner a su hijo en ese lugar, una manera de explicitar que no hay lugar para oponerse al nombramiento de Checho.

Yo no quiero. ¿Por qué no hay espacio en esa formación para dirigentes de Lanús y Vélez? Sencillo: los dos clubes habían anticipado públicamente que no querían a Batista. “Ellos tienen una oportunidad para empezar a diferenciarse claramente de Grondona desde ahora”, analiza un dirigente pro Grondona. Es que en los pasillos de la AFA creen que los dos clubes tienen intenciones de tener su propio candidato a presidente en 2011. “Vélez está listo para romper con el Viejo”, va a más la misma fuente. En el club no piensan lo mismo: “Los cambios hay que hacerlos con Grondona adentro, si lo enfrentás no tenés chances”, reflexiona un dirigente desde Liniers.

La estrategia del club, entonces, es lograr que se modifiquen los mandos intermedios dentro de la estructura de la AFA. En esa línea ven como un paso adelante la salida de Noray Nakis (presidente de Deportivo Armenio y afín a Maradona) de la Comisión de Selecciones y la entrada de Contreras, Lerche y Turnes. Aunque sobre el santafesino tienen algún reparo: “El no quería a Batista, pero se ve que después de viajar a Japón con la Selección cambió de idea”, apunta la misma fuente, sugestivamente.

Cuando el papelito con el nombre de Batista sea elevado por Grondona –previa sugerencia de la comisión señalada– al Comité Ejecutivo, Vélez tendrá la oportunidad de manifestar su desacuerdo delante de todos. Otro hombre del club lo explicita: “Queríamos a Bianchi, pero se sabe que no hay lugar para él. De los que se mencionan nos gusta Sabella. Pero lo que más nos preocupa es el mal manejo del fútbol juvenil. Lo vamos a plantear en esa reunión porque queremos que las cosas cambien”, apunta Julio Baldomar, vicepresidente primero.

Por afuera, por adentro. Por un camino distinto al del grondonismo y el eje Vélez-Lanús se mueve Daniel Vila, el empresario de medios y presidente de Independiente Rivadavia que hace meses trabaja en su postulación. “Los ingresos de Lerche y Contreras a la Comisión de Selecciones es un mensaje para él; Grondona le quiere demostrar que él siempre tiene en cuenta al interior”, dicen en la AFA. La no inclusión de los clubes indirectamente afiliados en los grandes asuntos del fútbol es, hasta acá, la carta de Vila.

Ahora, ¿quién será el candidato de Grondona en 2011? “El, ¿quién si no?”, responde el mismo dirigente. Hay que entender que aquella idea de que el año que viene sería el de la jubilación del presidente ya murió. O, mejor, nunca nació. “La familia quiere que descanse, acá en Arsenal tiene un lugar para estar tranquilo”, había dicho, meses atrás, Julito, el mismo que ahora entrará en la comisión pro-Batista. Nada que ver: la frase “Grondona cumple el mandato y se va” es, a esta altura, una burda imitación del cuento de la buena pipa.

Batista desespera, Bilardo piensa. Una semana atrás dijo que necesitaba ser confirmado para “armar el equipo para salir campeón del mundo en Brasil”. Esta vez expresó que veía que estaba todo dado para ser elegido. Por eso, ayer fue el propio Julio Grondona el que le puso un freno a Sergio Batista: “Que espere el momento que corresponda”, le mandó el mensaje a la ansiedad del entrenador de la Selección. Es que, más allá de los tiempos formales, nada cambiará la designación de Checho.

En todo caso, lo que surge como nuevo escenario es la disputa entre el DT y Carlos Bilardo. “Si al Narigón se lo puso para contener a Maradona, con Batista como técnico su cargo no tiene razón de ser”, especulan cerca de Grondona. Hasta aquí, Checho le dio a Bilardo un lugar que el mánager no tenía en el ciclo anterior. Eso no le asegura nada: Bilardo sigue pensando que el mejor para el cargo es Alejandro Sabella. “Pero no lo va a proponer; si lo hace estaría marcando su propia salida”, cuenta un dirigente.

Una vez nombrado, el entrenador podría bajar sus índices de amplitud hacia Bilardo. Igual, no se caracteriza por ser un hombre de ir al choque, por lo que en la AFA no creen que quiera correr del camino a quien fue su técnico en los mundiales México ’86 e Italia ’90. “Puede dejar que el tiempo actúe solo: el contrato del mánager vence en octubre de 2011”, cuentan desde Viamonte. La fecha está atada al final del mandato actual de Grondona.