Desde que se instauró el sistema de 3 puntos por partido ganado, el empate sirve de poco. Sobre todo si uno lucha por el título o pelea por la permanencia en la categoría. En el caso de River, es el sexto empate consecutivo del Torneo y en este tramo perdió de sumar 12 puntos. Es decir, de 18 en juego sólo sumó 6 y esto no es bueno para la actualidad que vive River con el tema descenso.

En los primeros minutos el mediocampo fue zona de paso liberado y los dos aprovecharon esa falta de control para llegar con peligro. Al minuto, De Olivera se debió esforzar para desviar al tiro de esquina un buen disparo del paraguayo Rodrigo Rojas y, a los 6', fue Carrizo el que tuvo que intervenir para ahogarle el gol al colombiano Giovanni Moreno.

A los 11', Moreno dejó solo a Bieler y el delantero se apichonó delante del arquero y con una burda pifia remató desviado.

Luego, el trámite se tornó más disputado en la mitad, pero siempre con una supremacía para los hombres de Miguel Angel Russo, porque Yacob era más que Ballón y, fundamentalmente, porque entre Ortega y Lamela no hacían un Moreno.

A falta de poco más de un cuarto de hora para el descanso, el propio Giovanni destrabó el partido. Recibió, en el área, un envío alto de espaldas al arco, desairó a Chiche Arano y sacó un zurdazo cruzado que fue directo a inflar la red. El 1-0 estaba bien porque Racing pretendía más. Al menos lo podía demostrar en el juego.

Ariel Ortega se quedó en los vestuarios después de los primeros 45 minutos. Lo reemplazó Diego Buonanotte, que marcó el empate al minuto de la segunda parte, con un zurdazo potente.

La reacción de River no se quedó ahí y arrinconó decididamente a Racing, que en esos momentos se conformaba sólo con capear el temporal. El que estuvo más cerca de desnivelar fue Pavone, pero De Olivera le sacó un buen remate de media distancia.

El visitante sufría porque Moreno ya no tenía tanta trascendencia y porque Toranzo no pudo suplir los baches del natural conductor. Sin embargo, tras el 1-1, fue el mejor momento de River hasta que perdió a Román, lesionado. Lo tuvo Funes Mori y después Pavone, que exigió a De Olivera.

Racing salió de su letargo con una contra que encabezó Bieler, que se despachó con un remate que impactó en el palo de Carrizo y provocó murmullo en el Monumental. Sucedió algo similar cuando Toranzo combinó un avance con Giovanni Moreno.

La semana próxima River visitará a All Boys y después llegará el superclásico con Boca. Racing será local ante Arsenal. Tanto a River como a Racing les vendría bien regresar a la victoria cuanto antes porque parece que van penando a medida que avanza el campeonato.