El testimonio de una mujer en el marco del juicio por el crimen de Ramoncito González tuvo un desenlace inesperado. Debió confrontarse con otra testigo en un careo que fue dispuesto por los integrantes del Tribunal. Hablaron por varios minutos y las dos se mantuvieron en sus dichos. Tanto a los jueces como a las partes les quedó la sensación de que alguna de las dos miente.
En la octava audiencia que comenzó a las 9.45 comparecieron por la mañana David Velozo, Sergio Ríos y Ramón Villalba. Los testigos relataron qué hicieron y dónde estuvieron la noche en que la víctima desapareció. No aportaron ningún dato interesante y como el resto de los testigos que ya pasaron por el juicio se mostraron con dificultades para recordar.
El testimonio más relevante fue el de Justina Beatriz Maidana. Contó que en la noche del viernes 6 de octubre de 2006, se encontraba trabajando en la Terminal de Omnibus de Mercedes y estaba acompañada por María Ramírez y Norma González (madre de Ramoncito). Recordó que alrededor de las 23.30 llegó el niño y le pidió monedas a su mamá y cuando consiguió el dinero se fue.
La declaración llamó la atención al Tribunal y a las partes debido a que Ramírez había testimoniado en la primera audiencia que esa noche en la Terminal sólo estaban ella y Maidana. En aquella oportunidad dijo que el viernes 6 de octubre a eso de las 20:30 se acercó Ramoncito y les pidió monedas, es entonces cuando la declarante le dijo que se vaya del lugar y que fuera para su casa. Contó que alrededor de las 22 llegó la madre del niño diciendo que su hijo había desaparecido y que al otro día le aconsejó que haga la denuncia porque el menor seguía sin aparecer.
A raíz de las contradicciones en la declaración de ambas testigos, se solicitó un careo que se llevó a cabo por la tarde.
El Tribunal dispuso sentarlas enfrentadas y que dialoguen para ver si podían llegar a un acuerdo y determinar quién de ellas estaba mintiendo, teniendo en cuenta que ambas estuvieron en el mismo escenario y vivieron situaciones distintas.
Las mujeres conversaron por varios minutos y las dos se mantuvieron en sus dichos. La situación fue advertida por los jueces, que decidieron dar por terminado el careo.
Minutos después fueron llamados a declarar el oficial Gustavo Lezcano Cáceres y Verónica Soto.
El primero se refirió a la exposición que efectuó Norma González la madrugada del sábado ante la desaparición de su hijo. En tanto Soto, que trabaja en la boletería de una empresa de la Terminal de Omnibus de Mercedes, contó que el viernes 6 de octubre por la noche Ramoncito estuvo con ella un rato y luego se fue en compañía de un joven conocido como Alfonso, quien parecía estar ebrio.
Por otra parte el Tribunal dio a conocer quiénes serán los médicos que estarán a cargo de realizar la pericia psiquiátrica a Ramonita Gauna, Juan Carlos Gauna y Clara Gómez, testigos encubiertos en la causa.
Por parte de la defensa actuará el doctor Oscar Yzzaman y por la querella, la médica Sara Lebherz de Castillo. En representación del Ministerio Público se desempeñará la doctora Marcela Triay. El psiquiatra Roberto Galeana y la psicóloga María Isabel Castillo por la Asesoría de Menores y el doctor Rodolfo Díaz fue dispuesto por el Tribunal.
El grupo de profesionales harán los estudios psiquiátricos a los testigos y darán a conocer en semanas si están dispuestos a declarar y la modalidad en que lo harán de ser así.