Gustavo Daniel Prellezo, el ex policía bonaerense condenado a reclusión perpetua por el asesinato del fotógrafo de NOTICIAS José Luis Cabezas, empezaría mañana a cumplir arresto domiciliario, luego de que la Cámara de Apelaciones y Garantías de Dolores rechazara hoy un recurso de la Fiscalía que se oponía a ese beneficio.

Fuentes judiciales confirmaron que, a partir de esta decisión de los camaristas, el ex subcomisario de Pinamar "seguramente regresará entre mañana y el lunes a su casa" para seguir cumpliendo la pena allí. En rigor, Prellezo irá a la vivienda de su padre, Anastasio Prellezo, quien la semana pasada firmó el escrito por el cual asumió la custodia de su hijo en su domicilio de calle 60 del barrio platense Los Hornos. La mujer de Prellezo, Rosa Rodríguez, también asumió el compromiso ante los tribunales de Dolores.

El fiscal Diego Escoda había solicitado a los camaristas que revoquen la excarcelación de Prellezo, con el argumento de que no es mayor de 70 años (tiene 48) ni sufre una enfermedad incurable en fase terminal (padece hernia de disco y lumbalgia), dos de las condiciones que el artículo 159 del Código Procesal prevé para el otorgamiento del arresto domiciliario.

El funcionario del Ministerio Público había argumentado además que la Cámara de Dolores concedió la morigeración de la pena para el asesino de Cabezas sin dar vista previa de esa decisión a la Fiscalía. Y había planteado, a su vez, que el Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) no tendría en disponibilidad la pulsera electrónica para colocar a Prellezo para controlar que no salga de la casa de su padre.

Al fallar en favor del arresto domiciliario, los jueces argumentaron que el ex subcomisario de Pinamar " necesita de un ambiente carente de humedad" y de " aplicaciones de calor que calmen sus dolores". El fallo detalló que el ex policía,detenido desde hace 13 años, "padece una dolencia crónica" por "hernia de disco en la columna y lumbo-ciática crónica recividante de cintura, con principio de artrosis", que requiere tratamiento de kinesiología constante.

Al ser condenado en el año 2000, Prellezo fue hallado " coautor penalmente responsable de los delitos de estafa y sustracción de persona agravada por la muerte de la víctima en concurso real, y este último en concurso ideal con homicidio calificado por alevosía en carácter de autor".

Cabezas fue secuestrado y asesinado el 25 de enero de 1997, después de hacer su trabajo en una fiesta en la casa del empresario postal Oscar Andreani en Pinamar. Su cadáver apareció calcinado en su auto -también quemado- en una cava de General Madariaga. Cabezas le había sacado fotos a Yabrán -dueño entonces de la empresa OCA- y a su esposa. El empresario había sostenido que "sacarme una foto a mí es como pegarme un tiro en la cabeza".