El partido comenzó trabado, demasiado cortado y muy incómodo para River. Argentinos Juniors asumió la inciativa aunque el primer remate al arco desde lejos (y sin peligro) fue de River a través de Ariel Ortega. Sólo el intento dede destacarse porque el tiro en sí fue defectuoso. Demasiado.

Hay que recordar también que Argentinos no pudo contar con Néstor Ortigoza porque el triubunal de disciplina lo sancionó con 2 fechas de suspensión, lo que significó una baja considerable para Argentinos en aquello del quite y la distribuición del juego.

River estuvo bastante pasivo en los primeros minutos al quedar muy lejos del arco de Argentinos defendido por Nicolás Navarro. Quedó claro que en los primeros 15' Argentinos controló las acciones del juego ante un River muy pasivo. Aunque este dominio del local no se tradujo en llegadas de peligro. Fue sólo dominio territorial y del balón.

Se jugaban 20' y el espectáculo entregaba poco, aunque Argentinos era el que seguía proponiendo algo más que River por entrega e intenciones. Lo de River era muy pobre porque sólo apostaba a defenderse y mantener su orden defensivo. Mejores argumentos del lado del local pero sin generar peligro ostensible. Argentinos merodeaba el rancho de River pero no lograba perforar.

A los 23', luego de un córner, Savia estuvo cerca de anotar un gol de cabeza para los de Troglio que no se dio porque su cabezazo se fue por arriba del travesaño. River dejó cabecear sólo al central de Argentinos. Hasta este momento, la única chance de zozobra concreta había sido para Argentinos Juniors con una pelota detenida.

En 30' de juego lo de River fue inexistente porque no pudo juntar a Ortega con Diego Buonanotte, éste último muy lejos del nivel exhibido antes del fatal accidente. A los 31', en una jugada extraña Funes Mori llevó peligro al arco de Argentinos con una acción individual poco ortodoxa que terminó en un centro fallido para Pereyra que no llegó a tocar el balón para meterlo dentro del arco de Navarro.

A los 37' una aparición por derecha de Affranchino arrimó peligro al arco de Argentinos, quien antes estuvo cerca de anotar en un buen contragolpe que terminó en un remate franco trabado por la defensa del equipo de Ángel Cappa. Al menos, River pudo salir en cuentagotas lanzado en ataque aprovechando los espacios dejados por Argentinos. el claro dominador de las acciones en la primera mitad.

A los 42' un buen remate de Emilio Hernández fue sacado al córner por Juan Pablo Carrrizo, quién resolvió más simple de lo previsto el pelotazo. Los últimos minuntos de la primera parte mostraron más de lo mismo. Argentinos más decidido que un River expectante y especulativo.

Los primeros minutos del complemento mostraron a River un poco más decidido y asumiendo la iniciativa del juego. Como mínimo lo que se esperaba ver de un equipo líder que llegaba a la Paternal como candidato, si contemplábamos la actualidad de los mismos. Argentinos, en cambio, entró a jugar tras el descanso un tanto dormido. En 10' de juego este era el escenario.

Igualmente, si bien el partido cambió respecto del inicio, a River le faltaba 'chispa'. Ángel Cappa intentó con el ingreso de Lanzini algo más de frescura en la generación de juego, ya que Ortega y Buonanotte no pudieron hacer sus aportes. Pero esto no quedó aquí del lado de River porque el DT Cappa mandó a la cancha a Mariano Pavone en lugar de Buonanotte para darle más peso también a un ataque que hasta el momento había sido muy livianito.

A los 21' un buen ataque de River masivo, terminó con una definición displiciente de Ortega con una jugada que escaseó a lo largo del juego. River desaprovechó la jugada más clara de un partido que no se le presentó accesible en cuanto a los espacios.

Ortega estuvo muy displicente con el toque suave de derecha cuando bien pudo haber intentado un remate más potente que pudo haber complicado más de la cuenta a Navarro, quien terminó luciéndose para la foto ante la debilidad del remate franco.

Y Argentinos también desperdició su gran chance con un cabezazo de Blandi. Un gran centro de la derecha de Bogado (desiquilibrante para Arano) terminó en la cabeza del delantero que no pudo aprovechar su ocasión. Esta vez River fue el que zafó de milagro.

El cabezazo se fue cerca del poste izquierdo de Carrizo que ya nada tenía por hacer. Pareció que en el tramo final del partido los espacios se abrieron y que había más chances para quien asumiera el rol de ganador.

Cuando corría más de media hora, ese mejor inicio de River había quedado en el olvido. Argentinos volvió a tomar el comando de la pelota pero pasó lo de toda la tarde. El equipo local no la pudo aprovechar para sacarle el mejor rédito a la tarde.

En los minutos finales River intentó quebrar el marcador con algunos remates de larga distancia que mantuvieron activos al arquero de Argentinos, uno de los espectadores de lujo de la tarde al igual que Carrizo, del lado de River.