Política
Ley "de utilidad pública" para Papel Prensa y acciones judiciales contra Clarín y La Nación

Ley "de utilidad pública" para Papel Prensa y acciones judiciales contra Clarín y La Nación
24/08/2010 | Sin duda que han ocurrido graves irregularidades en la actividad de la empresa Papel Prensa desde 1975 a la fecha. Pero el tema de fondo para los Kirchner es avanzar contra "un poder invisible a los ojos" y que se supone que lo tienen Grupo Clarín y La Nación, a quienes se subordinan los intereses del Estado desde hace años.  

La Presidenta anunció que el Ejecutivo presentará ante la Justicia el informe en el que se denuncian crímenes de lesa humanidad durante la apropiación ilegal de Papel Prensa.

La Presidencia de la Nación enviará el informe de la comisión investigadora o auditora de Papel Prensa a la Procuración del Tesoro, a la Secretaría de Derechos Humanos y otras instancias del Ejecutivo Nacional para que estos instruyan a la Procuración General que demande a los accionistas privados y a ejecutivos y ex ejecutivos de la empresa,

Cristina cuestionó que Papel Prensa "es la única que produce y comercializa pasta de celulosa para hacer papel de diario en Argentina" y por eso enviará un proyecto de ley al Congreso para declarar de utilidad pública la producción de Papel Prensa, realizar las inversiones necesarias para lograr el autoabastecimiento de papel de diario y no tener que importar ese insumo, y  crear una comisión bicameral de seguimiento de Papel Prensa.

No obstante, más que Papel Prensa, el tema evidente de los Kirchner es desarticular la supuesta sociedad informativa entre Grupo Clarín y S.A. La Nación, que para Cristina es "un poder oculto" y "que muchos temen".

La expresión de ese pacto sería el pacto de sindicalización de acciones de Papel Prensa que, según ella, los funcionarios públicos pudieron encontrar una copia en los expedientes de la quiebra de la editorial La Razón, cuyas acciones en Papel Prensa se las quedaron los otros 2 accionistas, pero básicamente Grupo Clarín.

Pero comencemos por el principio.

El acto en Casa de Gobierno comenzó con la palabra del síndico por el Estado en Papel Prensa, Alberto González Arzac.

"En este informe se verifica de forma indubitable el accionar ilegal de los diarios participantes en las transferencias accionarias y permite que la verdad sobre Papel Prensa S.A. se alcance de manera incontrovertible", dijo él.

Le siguió Beatriz Paglieri, quien lideró la comisión investigadora que ordenó Guillermo Moreno, secretario de Comercio. De hecho, ella ha sido 'mano derecha' de Moreno en el destrozado Instituto Nacional de Estadísticas y Censos.

Dicen que Cristina tiene destinos promisorios para Paglieri, según prospere el resultado del informe sobre Papel Prensa.

La funcionaria no agregó nada de lo que ya estuvo anticipando en días anteriores. Básicamente,

"Hubo un pacto de silencio por el que se utilizaron instrumentos del terrorismo de Estado para la apropiación de acciones";

 "El objetivo fue lograr ventajas competitivas que los diarios apropiadores tuvieron";

"Papel Prensa les ha vendido a sus socios privados papel por debajo del costo de producción".

También rindió un homenaje a Julio Ramos, quien fue director del diario Ámbito Financiero, y escribió el libro Los Cerrojos a la Prensa, donde denunció el accionar de Papel Prensa.

Paglieri habló de gran cantidad de propietarios o directores de diarios del interior del país presentes, que "con su evidencia o testimonio pueden dar fe de lo que estamos diciendo" (aunque entonces la cámara gubernamental enfocó a Hebe de Bonafini...).

También acusó a Grupo Clarín y S.A. La Nación: "No han realizado inversiones para mejorar su eficiencia y calidad competitiva". "Producen para su propio abastecimiento y no para la sostenida demanda del mercado interno e importan el papel en un 50% al precio histórico al que ellos mismos se abastecen".

Ella habló de logros coyunturales por las "prácticas oscurantistas con vicios de legalidad surgen como algo habitual en Papel Prensa S.A. Basta, como ejemplo, el pacto de sindicalización de acciones que hicieron los socios privados y que nunca fue explicitado ni al Estado accionista ni al órgano de control, violando la normativa vigente".

Entonces llegó la cadena nacional de Radio y TV para Cristina de Kirchner, desde la Galería de los Patriotas Latinoamericanos de Casa de Gobierno.

Cristina comenzó exhibiendo una página de diario Clarín del lunes 23/08, con el titular editorial "El gobierno avanza en Papel Prensa para controlar la palabra impresa".

Según Cristina, la idea implícita de Clarín es que quien controla Papel Prensa controla la palabra impresa, y que ella coincidía.

A partir de entonces comenzó un interminable relato, con algunas fallas informativas interesantes.

Por ejemplo, Grupo Prisa nunca fue accionista de Cimeco, la empresa hoy de Grupo Clarín que controla los diarios Los Andes, de la ciudad de Mendoza; y La Voz del Interior, de la ciudad de Córdoba.

En el inicio de Cimeco, fue una sociedad del español Grupo Correo, hoy Vocento, con Grupo Clarín y S.A. La Nación.

Luego, otro ejemplo, Cristina nunca explicó cómo fue que los Civita y sus socios le cedieron a David Graiver y sus testaferros el proyecto Papel Prensa. Fue apelando a la presión del entonces ministro de Economía, José Ber Gelbard, sobre la Editorial Abril, de los Civita.

Es cierto que Grupo Clarín y S.A. La Nación han cometido muchísimas irregularidades en la administración de Papel Prensa. Pero también lo es que hasta ahora no le había importado a los Kirchner. O sea que hay un objetivo político en la investigación antes que un apego a la transparencia administrativa.

Acerca de cómo fue la transferencia accionaria de los Graiver a Clarín, La Nación y La Razón, Cristina no cometió los errores de Paglieri acerca de torturas y vejámenes. Lo que sufrieron los Graiver fue posterior a su salida de Papel Prensa, y eso es irrefutable.

Entonces Cristina intentó darle un marco conceptual de que todos los argentinos se encontraban bajo libertad condicional y entonces dijo que los Graiver fueron mantenidos en libertad hasta que firmaron la transferencia accionaria.

No coincide con el relato histórico pero Cristina, además, omitió que el estudio jurídico de José Alfredo Martínez de Hoz atendía intereses de los Graiver, por ejemplo. Luego, si la sociedad argentina vivía en libertad condicional y ese es un motivo para cuestionar la transferencia accionaria, todos los negocios pactados entre 1976 y 1981 podrían revisarse. Una locura.

Cristina explicó que enviará al Congreso un proyecto de ley que busque "declarar de interés público la producción de pasta celulosa y papel de diario, su distribución y comercialización".

De todos modos es evidente que Grupo Clarín y S.A. La Nación no serán los accionistas privados exclusivos de Papel Prensa en el futuro.

"También encomendará al Ejecutivo realizar un marco regulatorio de este insumo básico y producido por una sola empresa, con premisas de tratamieto igualitario para todos los diarios de la República Argentina en precio, condiciones y cantidad", agregó ella.

Además aclaró que se deberá impulsar una política de mayor inversión para que no deba importarse papel para la prensa y que todo sea producción nacional.

Esa ley también impulsará la construcción de una comisión bicameral de seguimiento "porque queremos someter el marco regulatorio al parlamento, queremos que cada uno de los legisladores y partidos politicos opinen y voten", agregó Cristina.

"Además queremos que miembros de esa comisión fiscalizadora participen también como observadores en las reuniones de directorio de Papel Prensa
para que realmente haya control", dijo la Presidente.

Antes, hay que volver al comienzo: Cristina anunció que el Ejecutivo presentará ante la Justicia el informe en el que se denuncian crímenes de lesa humanidad durante la apropiación ilegal de Papel Prensa.