Randazzo brindó una rueda de prensa a periodistas del interior, y admitió que hay una severa distorsión interna en el país, que, dijo, la Nación trata de resolver con obras de infraestructura y aportes extras, especialmente para el NEA y el NOA.
Entre las obras consideradas prioritarias, el ministro aseguró que el Gasoducto es una obra que pronto estará en marcha y consideró que Garabí es otra obra que debe hacerse para garantizar energía barata a la región, aunque sobre la hidroeléctrica, no dio mayores precisiones.

“Sabemos que la situación de las provincias es dispar, pero el precio de la energía, lo definen las provincias, porque la Nación subsidia el costo, pero las provincias hacen la distribución y ahí se encarece”, precisó.

El ministro amplió declaraciones sobre ambos proyectos luego de que la Presidenta firmara el contrato para la construcción del gasoducto Juana Azurduy, que comprende los 30 kilómetros iniciales de la obra que llevará el gas desde Bolivia hasta Campo Durán, Salta y de allí al GNEA.

Una vez completada esta obra (prevista para mayo de 2011), se iniciará la construcción de este último gasoducto que atravesará llegará hasta Corrientes, y tiene como objetivo abastecer de gas natural a regiones no cubiertas del noreste argentino.