El Banco Central de la República Argentina (BCRA) vive momentos intensos, a pesar de que Martín Redrado ya no lo dirige. Es que continúan los desplazamientos de técnicos y ahora se suma que cada vez falta menos tiempo para el vencimiento de los mandatos de seis de los diez miembros del directori o. El 23 de septiembre es el día final en el cual vence incluso el mandato de Mercedes Marcó del Pon t . Ahora la puja por asegurarse un espacio de poder dentro del banco es la principal tarea, según informó La Nación.

Uno de los principales frentes de conflicto pasa por las diferencias que existen entre Marcó del Pont y el ministro de Economía, Amado Boudou. El funcionario ganó poder con el nombramiento en el directorio de Sergio Chodos, a fines del año pasado, y luego se fortaleció tras la salida de Redrado, con la designación Benigno Vélez.

Desde la entidad afirman que "la relación con Boudou está en su mejor momento" y que "ambos se reunieron la semana pasada para hablar sobre varios temas", deslizaban anoche allegados a la presidenta del banco. En Economía, en tanto, prefiirieron el silencio.

A pesar de esto, diversas fuentes del banco consultadas por el matutino destacan que la relación de Marcó del Pont con Benigno Vélez es tensa. Incluso la economista prescinde del hombre de Boudou siempre que puede y, en su lugar, se vuelca a sus mujeres de confianza, Cecilia Todesca Bocco y Silvia Traverso. Marcó del Pont contaría con sólo dos aliados dentro del directorio: el vicepresidente, Miguel Angel Pesce, y Arturo O´Connell, para muchos la persona más influyente hoy en la presidenta del BCRA.

Cambios. El 23 de septiembre, además de la presidenta del BCRA, deberían abandonar sus cargos Pesce, el kirchnerista Waldo Farías, Arnaldo Bocco, y los lavagnistas Zenón Biagosch y O´Connell. Quedarían con mandato hasta 2013 dos kirchneristas -Gabriela Ciganotto y Carlos Sánchez-, además de Chodos y Carlos Pérez, un hombre de Redrado.

Vacantes. En las últimas semanas circularon algunas versiones de que el Gobierno contemplaba dejar vacantes todos los cargos del BCRA que vencen, aunque es improbable ya que para ello también necesitaría modificar la Carta Orgánica de la entidad y pasar previamente por el Congreso.