Sociedad
Titanes por un Sueño o el catch as catch can de Fort (te extrañamos, Karadajian)

Titanes por un Sueño o el catch as catch can de Fort (te extrañamos, Karadajian)
22/07/2010 | Si Martín Karadajian viviera, Ricardo Fort y Marcelo Tinelli serían personajes del "catch as catch can" Titanes en el Ring. Aníbal Pachano sería la nueva versión de "El Hombre de la Barra de Hielo" y Matías Alé, el nuevo William Boo, aquel árbitro polémico (¿o estrenaría referís mujeres?). "Ricky" y "Marce" harían pareja, en días igualitarios, contra la Momia o contra Joe, el Mercenario. O contra Fabio "la Mole" Moli. Porque Bailando por un Sueño en su versión 2010 descubre a Canal 13 imitando aquella TV de los años "70, entre Héctor Ricardo García y Alejandro Romay, antes de que los estatizara Juan Perón.

(Martín Karadagian nació en Buenos Aires, el 30 de abril de 1922 y murió también la metrópolis, el 27 de agosto de 1991. De padre armenio y madre española, aprendió lucha grecorromana desde niño y en 1938 obtuvo el título mundial de la disciplina en su categoría. Comenzó su carrera como actor en Reencuentro con la Gloria, de 1957, drama dirigido por Iván Grondona. En 1958 apareció junto a Alberto Olmedo en Las Aventuras del Capitán Piluso en el castillo del Terror. Pero en 1962 creó la troupe de los Titanes en el Ring. Karadagián era el de campeón del mundo de lucha libre, con un secretario llamado Joe Galera y una admiradora conocida como La Viudita de las Flores Rojas. En un encuentro entre Karadagián y Olmedo (en su personaje del Capitán Piluso), el Canal 9, de Alejandro Romay, inauguró, desde el Luna Park, su primer móvil de exteriores).

 El 3 de mayo de 1997, en el diario La Nación, Luis Ini escribía:

"Soy alcohólico. Soy drogadicto. Soy homosexual. Soy un genio." Así escribió sobre sí el más que talentoso escritor norteamericano Truman Capote (1924-1984). Remedando la verba capotiana, a Martín Karadajian, armenio y español de ascendencia, argentino por nacimiento y trayectoria, autoproclamado campeón del mundo del catch y titán de Titanes en el Ring, no cuesta imaginarlo calificándose: "Soy un dictador. Soy celoso. Soy un creador de fantasías y un comerciante. Soy un genio."

“Martín Karadajian, a partir de los 18 años, comienza a frecuentar el gimnasio del Luna Park, donde desde mediados de la década del 30 acostumbraba entrenarse la troupe de catch as catch can, agárrese como pueda, en inglés, llevado al habla popular a cachascascán”.

Piense Ud. si “catch as catch can, agárrese como pueda, en inglés, llevado al habla popular a cachascascán”, no resultaría apropiado asignárselo a Lucio Pagliaro, director general del 13, Adrián Suar, Marcelo Tinelli, Ricardo Fort para poder conseguir rating para un eterno 2do. como el Canal del Grupo Clarín; para seguir agarrado al rating como pueda como el conductor más gritón de TV argentina hace 21 años y si el agárrese como pueda a la fama no sería aplicable al chocolatero de la TV delete.

La Nación seguía diciendo:

“Para la década del 50, Martín ya era una especie de hombre fuerte de las espectacularmente violentas veladas nocturnas, odiado por las tribunas por su saña y falta de fair play, pero también admirado por un histrionismo a toda prueba, capaz de caminar de rodillas el cuadrilátero pidiendo clemencia, o dar pequeños saltos, colocar su mano en la frente y hacerle cuernitos al rival de turno”.

“Cuando la década del 60 comenzaba, Karadajian ya era todo un empresario del catch, un negocio que en el oscuro pasillo de la decadencia vislumbraba, al final, una puerta entreabierta, una puerta cuadrada, luminosa, catódica: la televisión”.

“Karadajian, hombre ducho en el comercio, el 3/3/1962 inauguraba un hito de la historia televisiva nacional, Titanes en el Ring”.

“A partir de ahí comenzó la etapa más famosa de Martín Karadajian y de su espectáculo circense participaron en las peleas del agárrese como pueda el ex boxeador italiano, alguna vez campeón mundial de peso pesado, Primo Carnera; otro ex pugilista e ídolo nacional, el Mono Gatica; el hermano playboy de la reina Fabiola de Bélgica, Jaime de Mora y Aragón; Bongo, un oso de dos metros; y -tal vez súmmum onírico de todos los tiempos- el Hombre Invisible”.

“Rodolfo Di Sarli, el relator, narraba hechos, que, decía, sólo él podía observar gracias a que utilizaba unos lentes especiales, parecidísimos a los de soldador”.

Díga Ud. si Titanes en el Ring no resulta el Bailando por un sueño 2010 donde la lucha física teatralizada no se ha reconvertido en un símil de la pelea verbal y si Marcelo Tinelli no resulta ser una versión coetánea de Rodolfo Di Sarli.

“Siempre exigente con sus empleados ("Si llegan tres minutos tarde, los suspendo. Si se ponen mal el traje, los suspendo. Si se arreglan mal el pelo, los suspendo. Esto tiene que funcionar como un mecanismo de relojería: el absurdo y el humor también tienen sus reglas muy precisas)”.

Si Ud. se fija el parecido es total, en Bailando por un sueño 2010, “el absurdo y el humor también tienen sus reglas muy precisas”.

“En el futuro, tal vez, cuando generaciones venideras quizá descubran algo de su magia, seguramente lo conocerán con un calificativo que a él (Martín Karadajian) -como muchas veces lo aclaró-, no lo ofendía sino que le agradaba: payaso”.

Diga Ud. si el calificativo de “payaso” ¿puede llegar a ofender a quienes participan de Bailando por un sueño 2010?

“El ciclo se mantuvo en el aire con intermitencias hasta 1988, muchas veces éxito absoluto de rating, con pico notables en noviembre de 1972 con la famosa pelea en el Luna Park entre Martín y la Momia”.

Existe para Ud. ¿alguna diferencia entre los vaivenes de rating que obtenía Martín Karadajian con los que consigue Tinelli en el sube y baja de sus extensas temporadas en el 13 de Bailando?

“Varios personajes salieron de esa verdadera cantera circense, alguna vez compuesta por 75 individualidades: el indio Comanche, poseedor de los implacables "dedos magnéticos"; el estilizado y correcto Caballero Rojo; el ancho Rubén Peucelle; la misteriosa y casi imbatible Momia; William Boo, el árbitro más malo del mundo; Pepino, el payaso; y otros muchos nombres más”.

Recuerde Ud. cuántas vedettongas y personajes circenses han salido y seguirán saliendo de la payasesca versión 2010 de Titanes por un Sueño 2010, perdón leáse Bailando por un Sueño 2010.

En La Nación, Luis Ini remata preguntándose:

“Donde nada es real y no hay nada de dónde agarrarse ¿cuántos Martín Karadagian hay posibles?”

Sr. Luis Ini: En el mundo de la TV nada se tira, todo es reciclable, si lo habrán aprendido Lucio Pagliaro, Marcelo Tinelli, Adrián Suar, Ricardo Fort y tantos otros.