Mondino A Diputados
Sin cambios en los negocios con Venezuela

Sin cambios en los negocios con Venezuela
15/07/2010 | El ex Defensor del Pueblo de la Nación, Eduardo Mondino, se presenta ante la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados que se investigue el rol de la empresa Asotrade en la sospechada venta de maquinaria agrícola a Venezuela, entre otras nuevas aristas de la maniobra. En Venezuela se afirma que no hay cambios en las cuestionadas prácticas comerciales bilaterales con la Argentina
 

Yasmín Ojeda en La Verdad, de Maracaibo, Venezuela:

"Hace un año la Federación Agraria Argentina (FAA) alertó que la relación comercial internacional del país estaba marcada por negocios con "prácticas monopólicas". Comercio del que no escapaba Venezuela, tras la firma de varios convenios de abastecimiento de productos, suscritos por los gobiernos de Caracas y Buenos Aires.

Uno de esos beneficios reforzaría la gestión de PDVAL (Productora y Distribuidora Venezolana de Alimentos). Sumergida desde mayo de este año en un escándalo por la pérdida de alimentos descompuestos en contenedores. Algunos provenientes de Argentina. Otros de Brasil y Uruguay.

La vinculación comercial -de la que se señala en las últimas semanas vicios y coimas entre intermediarios venezolanos y argentinos- tiene riendas sujetadas a los grupos económicos de poder argentinos.

Pedro Peretti, secretario de Relaciones Internacionales de FAA, no ahonda en el tema, deja que la justicia concluya sus investigaciones sobre los sobornos. Adelanta que el negocio necesita "niveles de transparencia que parece ser que con Venezuela no los tiene".

Las exportaciones a Venezuela "siguen siendo igual (...) siguen las mismas prácticas. No ha cambiado absolutamente nada". Ayer Peretti dijo a La Verdad, en un contacto telefónico del que advirtió tener intervenida la línea de conexión por los "servicios de información de la Argentina", desconocer las situaciones suscitadas con las exportaciones arrimadas a Puerto Cabello, coordinadas por PDVAL. "No sé de qué me habla, habría que tener esos (contenedores), lo que dicen los números de ese negocio".

Peretti mantiene la consideración de 2009. "La concentración económica de los sectores exportados sigue siendo como hasta ahora. ¿El comercio con Venezuela? Estamos muy contentos, sea multiplicado por varios miles de pesos. Nosotros lo vemos muy bien que se comercie y se comercie con Venezuela".

Más de Argentina

Esos miles de pesos -convertidos en millones de dólares para Venezuela- habrían tendido su justificación para el momento. La relación comercial con Colombia desaparecía. El presidente Hugo Chávez declaró el cese de importaciones por las diferencias geopolíticas con el Gobierno neogranadino. El aumento de importaciones de Argentina apuntaría a carne de res, leche y derivados de lácteos.

"No es imprescindible que dependamos de Colombia, los alimentos en vez de venir por tierra, vendrán por agua", señaló el mandatario, al referir la sustitución internacional. Mientras, las importaciones de la red de PDVAL y las ya existente desde 2004 para Mercal, continuaban sin novedad.

PDVAL, filial para ese tiempo de Petróleos de Venezuela, estimó importar 24.000 toneladas de productos argentinos. La cifra aumentó tras las sustituciones. Registros de desembarque de Puerto Cabello mostraron más carga.

Mientras Venezuela atiborraba los muelles del puerto, con indicadores de actividad portuaria de 70% de la gestión nacional, en el territorio gaucho se manejaban transacciones que han salido a la luz por las denuncias de presuntos actos ilícitos en las comercializaciones.

Peretti aclara que "lo que se está discutiendo acá es el nivel de corrupción y nivel de coima que algunos opositores (señalan) a intermediarios vinculados con el Gobierno argentino. Eso está en plena etapa investigativa y hay que esperar que la justicia determine, pero los cuestionamientos no vienen por el comercio con Venezuela, sino por el nivel de transparencia que tiene que tener ese comercio".

A la Defensoría del Pueblo de esa nación llegó el primer caso de sobornos. En 2007 hubo una denuncia de un testigo que habría dado su nombre y dirección de domicilio falsos. Rogelio Martínez, indicado en el oficio, acusó irregularidades en la relación comercial.

Tres años después, el ex embajador por Argentina, Eduardo Sadous, levantó los ocultamientos de una "embajada paralela". Las tajadas de las negociaciones apuntan al Gobierno. Se destacan reuniones y cobros de comisiones, que ronde 15%, a empresarios argentinos para participar en la mesa servida de Venezuela".

En ese contexto, el ex Defensor del Pueblo de la Nación, Emilio Mondino, entregará hoy jueves 15/07 una copia del expediente que abrió en 2007 con la denuncia inicial sobre el pago de comisiones del 15% para exportar ese tipo de maquinarias al gobierno de Chávez y señalará una nueva serie de datos que le llegaron después de que en el 2009 dejó ese cargo, adelantaron a Clarín fuentes allegadas al ex funcionario.

Es que Asotrade estuvo a cargo del despacho de la maquinaria en el puerto de Buenos Aires “pero no figura en el expediente”.

Solo aparece Palmat, de Roberto Wellisch, que se lleva el 15% de un negocio neto de “US$ 180 millones”. Además, comentará que Asotrade “invitó a los empresarios a un cóctel en el buque Mississippi por el Río de La Plata para hablar del negocio”.

Voceros de Asotrade consultados por el diario Clarín explicaron que “fuimos contratados por Palmat para hacer los servicios de exportación, como el embalaje de las maquinarias en el puerto de Buenos Aires. Cobramos el 1%”.

Obviamente, si Palmat tercerizó el trabajo de embalaje ¿por qué trabajos cobró una comisión tan alta?

En los papeles, “Palmat firmaba un “contrato de agencia” con cada una de las fabricantes y a su vez Palmat firmaba uno general con Asotrade. La defensa de la compañía ya presentó estos contratos y todas las facturas de sus servicios en el expediente”.

Mondino también apuntará que el “gestor de los negocios” fue la Cámara Argentina de Fabricantes de Maquinaria Agrícola (CAFMA), que se quedaba con un 1% de las operaciones. Aunque este dato no invalida el rol del ex titular de la OCCOVI Claudio Uberti como el que “manejaba” el negocio en línea directa “con el ministro de Planificación, Julio De Vido” (Ver aparte).

Precisamente, el presidente de la CAFMA, José Alustiza, declaró ante el juez Ercolini que los “representantes argentinos” de Palmat, que tiene sede en Miami, eran “Francisco Stern y César Fernández”. Dijo se reunió con ellos en la sede de Asotrade y que, incluso, Wellisch, dueño de Palmat, estuvo en CAFMA para hablar del contrato.

Por otra parte, Mondino aclarará que el ex Defensor del Pueblo de Venezuela, Germán Mundarían Hernández “no me envió, en realidad, un alerta” sobre las maniobras en el 2007, tal como había trascendido.

Confirmará que el 6 de agosto de 2007 le mandó una carta por correo simple diciendo que “he recibido presentaciones en la institución a mi cargo, cuestionando presuntos pagos de sobreprecios en la operatoria por parte del Estado Venezolano”.

Y sostendrá que no fue un alerta -la carta llegó después de que en junio de ese año un testigo de identidad reserva le revelará la maniobra “sino un sondeo para saber cuánta información tenía” , comentaron las fuentes.

Basará esta interpretación en que después de esa carta “Mundarían no hizo ninguna otra pregunta y tampoco abrió un expediente en Caracas”.
Es más, luego fue nombrado embajador del gobierno de Hugo Chávez ante los organismos internacionales en Ginebra.

Pero el testigo que en 2007 denunció el supuesto pago de sobornos para hacer negocios con Venezuela dio un nombre falso y no puede ser hallado en el país.

Rogelio Martínez es el nombre que el testigo dio a la Defensoría del Pueblo cuando hace tres años denunció el escándalo ante este organismo por entonces conducido por Eduardo Mondino.

Según Clarín, el hombre dijo vivir en la localidad de Marcos Juárez, en la provincia de Córdoba (centro), y dio una dirección en la que nunca pudo ser hallado, pese a los esfuerzos de Mondino, quien lo buscó para obtener precisiones sobre el caso.

Martínez aseguró que conocía la existencia de irregularidades en la relación comercial entre Argentina y Venezuela, la imposición de un "gestor" para la venta de maquinaria agrícola y el modo en el que se pagaban las comisiones.