A Italia no le dio el piné en Sudáfrica y entrega rápido la corona. No habrá que quedarse con la arremetida del final a puro corazón de campeón que terminó arrinconando a los eslovenos hasta estirar cifras definitivas. Los italianos no contaron ni con la solidez que lo catapultó al título en el 2006 por más que le faltaran atributos técnicos. Si ni siquiera le queda la solidez...

La historia empezó pareja en un partido que repartió intenciones. Aunque en este contexto, lo de los eslovacos es más fluído y criterioso. A los italianos les costó demasiado progresar en ataque para conseguir el gol de la apertura del marcador. Los dirigidos por Marcelo Lippi, sólo arrimaron al arco en los primeros minutos con remates desde afuera del área.

El partido no era bueno, pero Eslovaquia rompió el hielo a los 25' y dejó el juego picante. Una incursión por el medio del área italiana de Vittek, rompió con un derechazo la defensa de Italia y lo puso contra las cuerdas. El campeón abdicaba cuando promediaba la primera parte y encima no mostraba nada como para entusiasmar con la remontada.

Encima, Eslovaquia jugaba mejor y estaba más cerca del segundo que Italia del empate. Lo de los italianos era pura impotencia, descontrol y nerviosismo. La única manera de generar peligro para Italia era si Eslovaquia se equivocaba. Los italianos casi encuentran el empate con un cabezazo de un jugador eslovaco que no batió su arco de milagro cuando intentaba rechazar.

Lo de Italia fue muy pobre en el primer tiempo mientras que lo de Eslovaquia fue aceptable. Hasta el punto que estuvo a punto de marcar de nuevo con un remate que besó el poste izquierdo del arco de Marchetti cuando se jugaba tiempo de descuento.

La historia para el complemento desde el lado de los italianos, parecía una quimera jugando de ese modo, sabiendo de que un gol era imperioso para seguir viviendo. Italia juega muy mal y Eslovaquia lo aprovechó con lo justo.

En el complemento, Eslovaquia tomó una actitud más especulativa e Italia se animó a pesar de las limitaciones. Sin ninguna idea clara en el medio, Italia se animó y salió a buscar el empate.

Los eslovacos llevaron al partido a una situación que menos le convenía. se refugió mucho contra su arco y dejó de incomodar a los italianos con sus ataques. Si Eslovaquia se animaba...

Aunque a los 10', Italia, armó lo mejor del partido y ponía en evidencia lo que venimos diciendo. Eslovaquia entraba en zona de peligro. El ataque italiano metió en cortada una pelota profunda y Di Natale falló su disparo desde posición peligrosa. Italia avisaba que no se entregaba con todos sus problemas a cuestas.

A los 66', Cuagliarela remató al gol y un defensor eslovaco la sacó en la línea cuando su arquero quedaba batido. Italia le tiraba encima con mucha vergüenza la historia, a un timorato Eslovaquia al que le faltaba grandeza para rematar su clasificación. La jugada fue dudosa, ya que no se pudo establecer bien si el balón ingresó en su totalidad al arco. Polémica para seguir.

Aunque Eslovaquia en una contra, casi estira cifras ante un Italia que se descompensaba por la situación de apremio que atravesaba. Y la historia decantó en favor de los eslovacos.

En una incursión ofensiva de las aisladas que propuso en la segunda parte, otra vez Vittek apuñaló el corazón de los italianos con su segundo gol. Fue un toque suave desde muy cerca del arco de Marchetti tras una jugada por la derecha.

Italia se descontroló y comenzaron las patadas sin sentido. El árbitro perdonó la vida de los italianos porque amonestó en vez de mostrar la roja. Cuando faltaban 14', nada parecía que podía cambiar. Pero una gran jugada de ataque de otro partido de Italia, terminó en gol de Di Natale y final de infarto.

Italia parecía no tener atributos ni tiempo para revertir un 0-2 ante un discreto equipo pero lo logró. Aunque a falta de segundos para el final y lo tenía contra el arco, Eslovaquia le anotó el tercero.

Era cantado que si Eslovaquia se animaba podía. Así fue. Quedaba tiempo para más emociones con el gol de Cuagliarella que le dio otro descuento a Italia con el 2-3 en tiempo de descuento. Pero no alcanzó.

Catástrofe de Italia que, de ser campeón, pasó a quedar eliminado en la primera fase por más de arremetida del final. La verdad, gran sorpresa. Si bien nadie posicionaba a Italia como candidato al título por nivel actual, no deja de sorprender que se vaya para casa tan pronto con los rivales que le ha tocado en el Grupo.