Se fue la segunda presentación de la selección, e independientemente de la fragilidad del Grupo, Argentina ha mostrado algo muy positivo: es probable que haga goles en todos los partidos que le toque disputar y tiene muchas chances de ser campeón. A tomar con tranquilidad esta apreciación.

Es poco probable, independientemente de jugar bien o mal, que Argentina no meta goles en un partido. Tendría que tener mucha mala suerte para que esto suceda. Este aspecto es nuestra carta de identidad. Somos temibles en ataque y de esto ya no quedan dudas.

Aunque el problema es el sistema defensivo. Entendemos que un equipo que es ofensivo, tenga que pasar naturalemente por problemas defensivos por obvios motivos. Aunque esto debería darse más por virtudes ajenas que por defectos propios. Y acá el tema, ya que por ahora no enfrentamos equipos potentes en lo ofensivo.

Sí, estos rivales nos sirvieron para probar el sistema ofensivo por las férreas defensas que debimos enfrentar. Esto hay que destacarlo porque en 2 juegos se anotó 5 goles y se falló otros tantos. Higuaín podría tener 6 goles en su haber y no 3, por citar el mejor ejemplo. Messi otros tantos. El petiso todavía no gritó pero cada vez está más cerca. Ya se viene...

Mejorando estos aspectos, somos candidatos al título, sin olvidar que no hemos dado buenos pasos previos al Mundial. Diego Maradona se ve beneficiado con una generación de jugadores que se ha unido, que son desequilbrantes y mueren de ganas de consagrarse con la selección. Por otra parte, lo único que les falta.

No nos subimos a la euforia del público futbolero, normal por otra parte. Aunque no por esto, dejamos de ilusionarnos...