Tras cuatro años y algo más de participar  junto a su marido en el Gobierno de la provincia, para sorpresa de propios y extraños finalmente Virginia” la ex ministra de Educación volvió a su viejo cargo de directora de escuela.

La ex primera dama y ex ministra de mala educación de la provincia habría retomado su cargo en la escuela Normal de Mercedes.

Su vuelta sin embargo ocurre en un momento con más sombras que luces, teniendo en cuenta “los valiosos antecedentes” que destilan tras su paso por el cargo ejecutivo durante la “joda” de su marido en el Gobierno.

Desde diversos enfrentamientos con la mayoría de los gremios docentes –a excepción del SUTECO quien sugestivamente nunca fue desairada por Virginia-, hasta las fantasmales denuncias de ñoquis en su ministerio; destacaron sus pasos en el cargo.

La ciclotímica funcionaria incluye “en su valioso legajo” también los masivos nombramientos que emigraron desde su cartera a diferentes escuelas de la provincia. Incluyó “porteros políticos” en escuelas –sólo para citar un ejemplo-, como la 645 de Concepción donde nombró cinco personas con cargo de ordenanza (porteros), para una currícula de 10 alumnos.

Pero el recuerdo más latente podría ser la “rescisión” del contrato de “alimentos y limpieza” que el estado mantenía con una empresa privada; justo en el día previo al mensaje de su marido en la legislatura. Momento tenso que debió soportar Arturo Colombi, quien “recibió reproches a los zapatazos” a raíz de la irresponsabilidad de su “querida esposa”.

Mientras la gestión actual en cambio sostiene que cada paso ejecutado por Virginia de Colombi en el ministerio, significan hoy millones de pesos tirados a la basura, en el ocaso se puede recordar también una de las últimas actividades que el “matrimonio real” llevó a cabo utilizando los bienes y recursos del estado público.

Hoy el delito de peculado los mantiene dentro de la provincia y bajo una caución real que debieron efectivizar para esperar el proceso en libertad.

En este caso la justicia sostiene que ambos “ ocuparon el avión del estado para “vacacionar” y según el Fiscal Buenaventura Duarte, el delito “está absolutamente probado”.

La “ex reina” sin embargo, como a lo largo de su estadía en el gobierno, no tuvo el mínimo empacho y regresó a su lugar de trabajo para “educar y servir” a los chicos mercedeños con un “baúl repleto de ejemplos y buenas acciones”.